viernes, 30 de marzo de 2012

EL FALSO AVIÓN DEL PENTAGONO





Comentarios sobre el ataque al Pentágono
Ver también: Evidencia de que un pescado congelado no impactó al Pentágono el 11 de septiembre, y tampoco lo hizo un Boeing 757 por Joe Quinn

El vuelo 77 despegó a las 8:20 am.
El piloto tuvo su última comunicación de rutina con la torre de control a las 8:50 a.m. “A las 9:09 a.m., siendo incapaz de encontrar al avión por radar, los controladores alertaron sobre un posible accidente”, reportó el Washington Post. El vicepresidente Dick Cheney explicaría más tarde que los terroristas habían “apagado el radiofaro, lo que llevó a reportar que el avión había aterrizado en Ohio, cosa que no había sucedido” [Meet the Press, NBC, 16 Sept 2001]

El 12 de septiembre se supo que el radiofaro había sido apagado alrededor de las 8:55 a.m., haciendo que el avión fuera invisible para los controladores aéreos civiles.  Durante este periodo de invisibilidad, se dijo que el avión dio una vuelta en U de vuelta a Washington. Esto, por supuesto, es una suposición. La información de que el avión giró no tiene una fuente conocida.

El problema es: apagar el radiofaro, bajo las circunstancias que había ese día, habría sido la mejor forma de encender las alertas.
 
Los procedimientos en caso de problemas con el radiofaro son bastante estrictos, en la aviación civil y militar. Las regulaciones de la FAA describen exactamente cómo proceder cuando un radiofaro no funciona adecuadamente; la torre de control debe establecer contacto radial de inmediato con el piloto, y si esto falla, inmediatamente dar la alerta a los militares, quienes enviarán cazas para establecer contacto visual con la tripulación. [Ver las regulaciones de la FAA: http://faa.gov/ATpubs]

La interrupción del radiofaro también provoca una alarma directa en el cuerpo militar responsable de la defensa aérea de los Estados Unidos y Canadá, el NORAD.

El radiofaro es la tarjeta de identificación del avión. Un avión que no tenga su tarjeta de identificación es INMEDIATAMENTE monitoreado, AUTOMÁTICAMENTE.

“Si un objeto no ha sido identificado en menos de dos minutos o parece sospechoso, es considerado una amenaza potencial. Aviones sin identificación, aviones en problemas y aviones que sospechamos están siendo usados para actividades ilegales pueden ser interceptados por un caza desde NORAD. [Vocero de NORAD: http://www.airforce.dnd.ca/athomedocs/athome1e_f.htm]
Ver también Facing Terror Attack's Aftermath, Boston Globe, donde leerá: "Snyder, el vocero de NORAD, dijo que sus cazas interceptan aviones en forma rutinaria."]

Sin embargo, de acuerdo a la versión oficial, considerando las condiciones que existían el 11 de septiembre de 2001, los “terroristas” de hecho dieron la alerta que DEBIÓ provocar la casi instantánea intercepción CATORCE minutos antes de que el avión se incrustara en el Pentágono. En algunas regiones, los controladores de tráfico aéreo tienen radares, llamados “primarios”, que son capaces de detectar movimiento en el aire. Pero los radares que normalmente se usan son los llamados “secundarios”, y están limitados a reconocer la señal enviada por los radiofaros, el que les dirá el registro, altitud, etc. Apagar el radiofaro hace que el avión se desvanezca para los radares “secundarios”. Tales aviones sólo aparecerán en los radares “primarios”. De acuerdo a la FAA, los controladores de Ohio no tenían acceso a radares primarios.

Ver: El choque en el Pentágono revela fallo en los radares, donde se lee:

"El avión de pasajeros que se estrelló en el Pentágono el 11 de septiembre desapareció de las pantallas de radar de los controladores por al menos 30 minutos (...) en parte porque fueron secuestrados en un área de cobertura limitada de radar. [...]

El avión, que viajaba desde el Aeropuerto internacional de Dulles hacia Los Angeles, fue secuestrado en algún momento entre las 8:50 a.m. (cuando los controladores de tráfico aéreo hicieron su último contacto de rutina con el piloto) y las 8:56, cuando los secuestradores apagaron el radiofaro, el cuál reporta a las pantallas de los controladores la identidad del avión, su altitud y velocidad.

El avión de pasajeros que se estrelló en el Pentágono a las 9:41 a.m., cerca de 12 minutos después que los controladores de Dulles dieron la alerta de que una nave no identificada se acercaba a Washington a gran velocidad.

Las respuestas al misterio de la desaparición de la nave comienzan con el hecho de que el secuestro se llevó a cabo en un área con un solo tipo de radar, confirmó oficialmente la FAA. Incluso cuando este tipo de radar es llamado sistema “secundario”, el del tipo usado casi exclusivamente por el control de tráfico aéreo. Detecta la identificación, destino, velocidad y altitud del radiofaro del avión y los despliega en la pantalla del controlador.

El “primario” es un sistema más antiguo. Lanza un haz al avión y le dice al controlador sólo que el aeroplano está en vuelo, pero no despliega su tipo ni altitud. Usualmente los dos sistemas están montados en la misma torre. El radar primario es utilizado sólo como respaldo, y normalmente es apagado por los controladores que manejan aeronaves en altitudes superiores a los 18 mil pies porque desordena sus pantallas.

Todos los aviones volando sobre los 18 mil pies deben tener un radiofaro operativo. Si el avión simplemente desaparece de las pantallas, la mayoría de los controladores puede cambiar al sistema primario, el que debe mostrar una pequeña marca en el lugar donde se encuentra el avión, aún si el radiofaro de la nave no funciona.

Pero el radar cerca de Parkersburg, W. Va., estaba construido sólo con el sistema secundario, llamado radar “solo faro”. Eso dejó ciego al controlador que monitoreaba el vuelo 77 en la central de Indianápolis cuando los secuestradores aparentemente apagaron el radiofaro, dijeron fuentes”.

El único efecto de apagar el radiofaro en ese preciso momento, entonces, fue hacer el avión invisible sólo para las autoridades CIVILES de aviación. Uno se pregunta cómo los “terroristas” sabían que hacer esto los haría invisibles a los controladores civiles de tráfico aéreo. Otra vez, bajo las condiciones de aquel día, y como una rutina general, apagar el radiofaro DEBIÓ atraer de inmediato la atención y escrutinio del sistema militar de defensa de los Estados Unidos DE FORMA AUTOMÁTICA. Por lo tanto es casi seguro que, durante todo el tiempo, fue visible y monitoreado por los militares.

De acuerdo a la declaración del General Myers, los militares esperaron tres cuartos de hora antes de ordenar a los cazas que despegaran. [Audiencia del Senado, 13 Sept. 2001]

Dos días más tarde, el 15 de septiembre, NORAD envió un comunicado de prensa contradictorio. Dijo que no habían sido informados del secuestro del vuelo 77 hasta las 9:24 a.m. y que inmediatamente dieron órdenes para que dos F-16 despegaran desde Langley, a 105 millas del Pentágono. Estaban en el aire a las 9:30, demasiado tarde... el objeto que impactó al Pentágono llegó a las 9:37.

Esta versión hecha toda la culpa a la FAA por esperar.

Pero esto no es plausible debido a que los procedimientos establecidos era automáticos. La pregunta que necesita ser respondida, considerando todo lo que SE SABÍA en ese “último momento” es: ¿Por qué se enviaron cazas en lugar de un misil?

El hecho es, independientemente de interceptar el vuelo 77, la situación de crisis que existía en ese momento demandaba una máxima protección aérea sobre Washington. Esta acción debería haber recaído en la base aérea de Saint Andrews, de la misma forma como el General Eberhart, Oficial al Mando del NORAD había activado el plan SCATANA y había tomado control del espacio aéreo de Nueva York para colocar cazas en él.

Para los militares, desde el momento en que fueron alertados de la desaparición del vuelo 77, que de hecho fue cuando se apagó el radiofaro y NO cuando la FAA supuestamente los llamó, no fue cuestión de que especularan si estaban lidiando con una falla mecánica. Los hechos en tierra fueron exactamente precisos: poco después de que dos aviones de pasajeros chocaron con las torres del WTC, el radiofaro de otro avión fue desconectado y su piloto no contestó el contacto por radio. La tarea de los militares no podría haber sido más clara: derribar el avión que se dirigía a Washington.

Los hechos muestran que los militares de EE.UU. NO TENÍAN LA INTENCIÓN de derribar lo que se haya dirigido al Pentágono, a pesar de la amenaza que representaba.

El 16 de septiembre de 2001, Dick Cheney trató de justificar el fallo de los militares declarando que derribar un avión civil habría sido una “decisión que debía tomar el presidente”. Jugó con la simpatía del pueblo norteamericano, diciendo que el presidente simplemente no pudo tomar una decisión precipitada donde “las vidas de estadounidenses estaban en juego”.

Sin embargo, las declaraciones de Cheney son falsas. Él comparó la intercepción del avión con la decisión de derribarlo. La intercepción se establece simplemente con el contacto visual, dando órdenes con señales de luz, y estando listos para tomar acciones. Derribarlo implica que los cazas ya estaban en posición para recibir la orden.

Es más, es incorrecto que esta decisión sólo pueda ser tomada por el presidente. La intercepción de una nave civil sospechosa es automática, y no necesita de ningún tipo de decisión política. Debió suceder el 11 de septiembre cuando se apagó el radiofaro. Los cazas debieron despegar inmediatamente... a menos que les hubiesen ordenado “quedarse en tierra”.
Una vez más, déjenme reiterar el hecho de que el vuelo 77 era invisible SÓLO para las autoridades de aviación CIVILES. El hecho de que un radiofaro se apague automáticamente alerta a la defensa militar aérea.

Siguiente Problema: Existen cinco baterías antimisiles extremadamente sofisticadas ubicadas para proteger al Pentágono de un ataque aéreo. Estas defensas antimisiles operan de forma automática.

El vocero del Pentágono, Teniente Coronel Vic Warzinski declaró que los militares no esperaban tal ataque. Eso no es creíble. Debido a que el radiofaro fue apagado, el Pentágono sabía muy bien dónde estaba el avión. Las comunicaciones entre controladores civiles de tráfico aéreo y las variadas autoridades federales funcionaron perfectamente.

A las 9:25, la torre de control del aeropuerto de Dulles detectó un vehículo no identificado acelerando a través del espacio aéreo restringido que rodea a la capital. [Washington Post, 12 Septiembre 2001]  La nave apuntaba hacia la Casa Blanca. “De pronto el avión giró lejos... Debió ser un caza. Debió ser uno de nuestros muchachos que enviaron, confundido al patrullar o proteger a nuestro presidente...Perdimos contacto con la nave. Y esperamos... entonces vinieron los controladores nacionales de Washington a nuestra sala y dijeron, “Dulles, detengan todo el tráfico entrante. El Pentágono ha sido golpeado”. [Danielle O'Brien, ABC News, 24 Octubre 2001]

El ejército posee bastantes sistemas de monitoreo de radar muy sofisticados. El sistema PAVE PAWS es utilizado para detectar y rastrear objetos difíciles de ver, como misiles volando a muy baja altitud. PAVE PAWS NO SE PIERDE DE NADA de lo que sucede en el espacio aéreo de Norte América. “El sistema de radar es capaz de detectar y monitorear un gran número de blancos que podrían ser consistentes con un ataque masivo SLBM (Misiles balísticos lanzados desde submarinos). El sistema es capaz de discriminar rápidamente entre los tipos de vehículos, y calcular sus puntos de lanzamiento e impacto. [ http://www/pavepaws.org/ y http://www.fas.org/spp/military/program/track/pave paws.htm ]

Por lo tanto, y en contra de lo que alega el Pentágono, los militares sabían muy bien que un vehículo no identificado se dirigía directamente a la capital. Sin embargo, los militares no reaccionaron, y las baterías antimisiles del Pentágono no funcionaron.

¿Por qué?

Los aviones y misiles militares poseen radiofaros que son mucho más sofisticados que los de las naves civiles. Estos radiofaros permiten a la nave declararse a sí mismas como amigas u hostiles ante los ojos electrónicos que vigilan el espacio aéreo norteamericano. Una batería antimisiles no reaccionará, por ejemplo, al paso de un “misil amigo”, cosa que en condiciones de batalla asegura que sólo destruirá al armamento y vehículos enemigos.

Asi que parecer ser que lo que haya impactado al Pentágono, DEBIÓ llevar un radiofaro militar con la firma de “amigo”. Es decir que se debió necesitar un avión militar norteamericano para penetrar las defensas del Pentágono, pues de otra forma se habrían activado automáticamente las baterías antimisiles. Extrañamente, toda la responsabilidad de la defensa aérea se ha atribuido al NORAD, cosa que simplemente no es verdad.

El Centro de Comando Militar Nacional (NMCC), ubicado EN el Pentágono, centraliza toda la información sobre secuestros aéreos y dirige operaciones militares. La NMCC estaba en máxima alerta la mañana del 11 de septiembre. La máxima autoridad militar de NMCC es el Presidente de los jefes conjuntos de personal. El 11 de septiembre, este papel era cumplido por el General Henry Shelton. Sin embargo, Helton estaba en ruta a Europa, en algún lugar sobre el Atlántico. De esta forma el papel fue tomado por su sucesor, el General Richard Myers, quien se estaba codeando con el senador Max Cleland al momento de los ataques.

En breve, las respuestas de lo que sucedió ese día pasan por fallas técnicas, problemas de coordinación, incapacidad temporal, ausencia de comandantes, transferencia de responsabilidades, etcétera.

Por supuesto, eso no responde la pregunta de por qué los sistemas automáticos en el lugar no funcionaron. Mike Rupperts ha escrito que ese día hubo “ejercicios militares”, sugiriendo que los sistemas automáticos estaban temporalmente apagados. Si ese es el caso, entonces es la coincidencia más grande de la historia, que hubiese sido el mismo día que unos cuantos terroristas locos, planeando desde una caverna en Afganistán, escogieran para atacar a Estados Unidos. O hubo alguien dentro del gobierno de los Estados Unidos que se los dijo.

En resumen, la más grande maquinaria militar del planeta ha sido obligada a declararse a sí misma la más incompetente. Y por su incompetencia cientos de vidas estadounidenses se perdieron y nadie ha sido señalado como responsable. Al mismo tiempo, leyes draconianas que limitan las libertades estadounidenses han sido aprobadas para “hacer más seguro a Estados Unidos de América”. El hecho es que si el sistema ya implementado hubiese estado en línea, no habría ocurrido el ataque a la segunda torre del WTC, y mucho menos al Pentágono.

La consideración de todos los aspectos del problema sugiere que los sistemas ESTABAN operacionales... y que el objeto que golpeó el Pentágono fue "leido" por las baterías antimisiles como " NUESTRO".

"Se debe recordar que el primer trabajo de cualquier conspiración, no importa si es política, delito o dentro de una oficina comercial, es convencer a todos que no existe ninguna conspiración. El éxito de los conspiradores estará determinado en gran parte por su capacidad de hacer esto." [Gary Allen, Ninguno Se atreve a Llamarlo Conspiración]

La verdad sobre 11 de septiembre es obviamente de importancia central.
Políticos prominentes y voces en los medios masivos de comunicación nos recuerdan sin cesar que "el 11 de septiembre cambió todo".

El 11 de septiembre se ha convertido en acontecimiento que define al nuevo siglo, siendo usado para justificar una oleada sin precedentes de políticas militaristas y represivas dentro de los EE. UU y en cualquier otro lugar.

Aun a pesar del significado evidente del 11 de septiembre, hubo una carencia asombrosa de discusión informada en los medios dominantes sobre lo que realmente ocurrió durante aquel día aciago.

Muchas anomalías y sospechas aparecen en la historia oficial, curiosidades que los medios de comunicación a menudo ayudaron a poner ante la opinión pública, y que no se han seguido o prestado la atención que claramente merecen. La pregunta obvia: “¿Por qué la administración estadounidense está tan en contra a una investigación pública transparente?" apenas ha sido preguntada.

En efecto, la renuencia de los medios de comunicación occidentales para cuestionar la versión oficial del 11 de septiembre, y el papel clave desempeñado por algunos elementos en los medios de propagar activamente esta historia improbable, pide una explicación por derecho propio. Cualquier investigación objetiva dede 11 de septiembre debe explicar el extraordinario fenómeno de sesgo grosero en los medios y su ceguera aparente. [Physics 9-11 org]

Esta serie de comentarios comenzó en septiembre de 2002 cuando muchos lectores de nuestro sitio nos inundaron con e-mails preguntando qué pensábamos sobre la evidencia de que el Boeing 757 NO chocó con el Pentágono. Hasta ese momento, no teníamos dudas de que las cosas habían sucedido exactamente como lo habían descrito los medios y la administración de Bush. Por supuesto, teníamos algunas ideas de QUIÉN estaba detrás de estos eventos, pero el punto es que no cuestionábamos los “hechos en terreno” del evento.
Ciertamente, porque esta era nuestra “creencia”, comenzamos a buscar datos con algo de prejuicio. Yo estaba bastante segura de que la teoría de que “no hubo Boeing” había sido diseñada para tenderle una trampa a la gente que preguntaba “quién lo hizo”, de modo que cuando la "prueba del Boeing" golpeando el Pentágono finalmente fuera revelada, todos los que sospechaban que fue un "trabajo interno" serían vistos como totalmente estúpidos y de esa forma todas las teorías de la conspiración serían aplastadas. De hecho, esperaba esa revelación diariamente y comencé a preguntarme qué pasó realmente cuando nunca llegó. ¿Podría ser posible que NO había pruebas de que un Boeing golpeó el Pentágono?

Tampoco consideré la posibilidad de que semejante “estratagema” pudiese haber sido perpetrado sobre el público estadounidense, mucho menos sobre los medios de comunicación. ¡Seguramente ningún elemento criminal dentro del gobierno estaría tan loco como para lanzar un avión robot cargando un misil y tratar de hacerlo pasar por un Boeing y esperar salirse con la suya! ¡Qué idea más lunática!

Y fue así como, con tales ideas en mente, comencé a investigar el tema. Han pasado más de dos años y medio y aún la prueba de que el Boeing impactó el Pentágono no ha sido revelada dramáticamente. Más aún, recientemente (enero del 2005) recibimos información de que el MOTIVO de que la declaración inicial que no fue un Boeing se debio a que imágenes satelitales de lo que REALMENTE impactó al Pentágono fueron tomadas por satélites pertenecientes a otros gobiernos.  Hasta este momento, se han retenido estas imágenes principalmente porque la norma es el "chantaje mutuo" en los niveles más altos del poder. Pero de lo que nos hemos enterado es de que estas imágenes han circulado entre ciertos grupos extranjeros de inteligencia gracias a, como diríamos, fugas de información planeadas. Tras saber de estas imágenes de una fuente muy digna de confianza que, por razones obvias, no puede ser nombrada, me di cuenta de que lo que está en juego es mucho más de lo que cualquiera se imagina.

Ciertamente, cualquiera que se aproxime al tema y sugiera cualquier otra cosa en lugar de la versión aceptada de los medios/gobierno, será acusado de ser un “teórico de la conspiración”.  Debo dejar constancia que he pasado 30 años estudiando psicología, historia, cultura, religión, mitos y lo paranormal. También he trabajado por muchos años en hipnoterapia, lo que me da un conocimiento mecánico bastante bueno que cómo opera la mente/cerebro de los seres humanos en estados profundos. Esto me lleva a ciertos hechos sobre la mente humana que no creo que la persona promedio sepa. Estos conocimientos son ilustrados en la siguiente historia sobre hipnosis:

A un sujeto le fue dicho bajo hipnosis que cuando despertara sería incapaz de ver a un tercer hombre en el cuarto que, se le había dicho, se había vuelto invisible. Se hicieron todas las “sugestiones apropiadas” para hacer esto “verdad”, tales como “NO VERÁS esto”, etc. Cuando el sujeto despertó, vio y contempló. La sugestión NO funcionó.

¿Por qué? Porque iba en contra de su sistema de creencias. NO creía que una persona pudiese volverse invisible.

Así que se hizo otra prueba. El sujeto fue hipnotizado otra vez y se le dijo que el tercer hombre había dejado el cuarto... que lo habían llamado por un asunto urgente, y se le describió la escena del hombre poniéndose su abrigo. La puerta fue abierta y cerrada para proveer de “efectos de sonido” y entonces el sujeto fue sacado del trance.

¿Adivinan qué pasó?

NO PUDO VER al tercer hombre.

¿Por qué? Porque sus percepciones fueron modificadas de acuerdo a sus creencias. Ciertos “censores” en su cerebro fueron activados de forma que fue aceptable para el instinto de supervivencia de su ego.

Los medios que aseguran la supervivencia del ego son establecidos bastante temprano en la vida por nuestra programación paternal y social. Este condicionamiento determina qué ES o NO ES posible; qué tenemos "permitido" creer para ser aceptados. Aprendemos esto primero al aprender qué satisface a nuestros padres y luego modificamos nuestra creencia basados en qué satisface creer a nuestra sociedad (nuestros semejantes). Esto es “transferencia”. Transferimos nuestro deseo/necesidad de complacer a nuestros padres, a la sociedad, e incluso a nuestro gobierno.

Volviendo a la historia, el tercer hombre recorrió el cuarto tomando cosas haciendo todo tipo de cosas para probar la conciencia del sujeto de su presencia. ¡Y el sujeto comenzó a ponerse histérico con toda esta actividad "anómala"! Podía ver objetos moverse a través del aire, puertas que se abrían y cerraban, pero no podía ver la FUENTE porque él no creyó que había otro hombre en el cuarto.

¿Así pues, cuáles son las implicaciones de este factor de la conciencia humana? (a propósito, ésta es también la razón por la cual la mayoría de las terapias para acabar con malos hábitos no funciona. Intenta ir contra un "sistema de creencias" que está impreso en el subconsciente, en que tal o cuál hábito es esencial para la supervivencia.)

Una de las primeras cosas que podemos observar es que todos tienen un sistema de creencias distinto, basado en su condicionamiento social y familiar, y que estas creencias determinan a cuánto de la realidad OBJETIVA pueden tener acceso. Las realidades, lo objetivo, lo subjetivo, o lo contrario, son un tema delicado. Baste con decir que los años de trabajo dentro de las mentes de toda clases de gente me ha enseñado que casi nunca percibimos la realidad como verdaderamente ES.

En la historia anterior, la realidad objetiva ES LA QUE ES. En esta historia, hay claramente una gran parte de la realidad que es inaccesible al sujeto debido a que un censor de la percepción fue activado por las sugerencias del hipnotizador. Es decir, el sujeto tiene una creencia fuerte, basada en su OPCIÓN sobre a quién o qué creer. En este caso, él ha elegido creer al hipnotizador y no a lo que podría observar si prescindiera del censor de la percepción que puso el hipnotizador al activar su “centro de creencias”, incluso si esa activación fue fraudulenta.

Y así es con casi todos los seres humanos. Le creemos al hipnotizador (la cultura oficial) y podemos, con astucia sobrenatural, negar a menudo lo que es correcto en frente de nuestra propia cara. En el caso del sujeto hipnotizado, está enteramente a merced del “hombre invisible” porque eligió no verlo.

Enfrentémoslo: se nos ha enseñado a evitar las realidades incómodas. Los seres humanos, al ser enfrentados con verdades desagradables sobre ellos mismos o su realidad, reaccionan como los alcohólicos que se rehúsan a admitir su condición, o como el esposo cornudo que es “el último en saber”, o la esposa que no se da cuenta que su esposo abusa de su hija. No me sorprende el estado de negación de la mayoría de los seres humanos. Es la norma cultural. Tampoco me sorprende que proyecten su malestar en aquellos que hacen preguntas desagradables acusándolos de ser “teóricos de la conspiración”.

Ahora que el lector tiene una vaga idea de que probablemente negará todo lo que voy a decir, pasemos al “contexto” que creo puede ser importante para los eventos del 11 de septiembre. El contexto es que el término “teoría de la conspiración” ha sido usado durante años de tal manera que sólo pronunciar estas palabras hacen que el estadounidense promedio apague sus capacidades para pensar. Es casi tan efectivo como emitir cualquier crítica al gobierno Israelí y ser llamado antisemita.

La primera cosa sobre la que queremos pensar es el hecho de que la palabra “conspiración” evoca tal reacción en todos nosotros: nadie quiere ser señalado como un “teórico de la conspiración”. Simplemente “no es aceptable”. “No es científico” o es evidencia de inestabilidad mental. ¿cierto? ¿Eso es lo que está pensando, no?

De hecho, apuesto a que el sólo hecho de leer la palabra produce ciertas reacciones psicológicas: una repentina aceleración de los latidos, y quizás una rápida mirada alrededor para asegurarse que nadie está mirándole mientras simplemente lee estas palabras en silencio.

¿Se ha preguntado alguna vez POR QUÉ la palabra provoca un instantánea reacción emocional? ¿Se ha preguntado por qué estimula tan fuerte “culatazo”? Después de todo, es sólo una palabra. Sólo describe la idea de personas en “altos puestos” pensando sobre cosas y haciendo cosas que manipulan a otras personas para producir un beneficio para sí mismos.

Richard M. Dolan estudió en las Universidades de Alfred y Oxford antes de completar su trabajo de graduación en Historia en la Universidad de Rochester, donde fue finalista para una beca Rhodes. Dolan estudió la estrategia de EE.UU. en la guerra fría, historia y cultura soviética, y diplomacia internacional. Escribió sobre “conspiración” en los siguientes términos:

La sola etiqueta (conspiración) sirve como un rechazo automático, como si nadie actuara en secreto. Permitámonos poner cierta perspectiva y sentido común a este tema.

Los Estados Unidos está constituido por grandes organizaciones (corporaciones, “grupos de interés”, y otros) los cuales son conspiradores por naturaleza. Esto es, que son jerárquicos, sus decisiones importantes son tomadas en secreto por unos pocos responsables clave, y no les importa mentir sobre sus actividades. Tal es la naturaleza del comportamiento organizacional. “Conspiración”, es este sentido clave, es una forma de vida alrededor del globo.

Dentro del mundo militar y de los aparatos de inteligencia, esta tendencia es agrandada a su máximo extremo. Durante los 1940s (...) los militares y científicos desarrollaron las armas más poderosas del mundo en completo secreto... (...)

Cualquiera que haya vivido en una sociedad represiva sabe que la manipulación oficial de la verdad ocurre diariamente. Pero las sociedades tienen sus muchos y sus pocos. En todo tiempo y todo lugar, son los pocos los que rigen, y los pocos quienes ejercen su influencia dominante sobre lo que llamamos cultura oficial. Todas las élites se preocupan por manipular la información pública para mantener las estructuras de poder existentes. Es un viejo juego.

Estados Unidos deAmérica es nominalmente una república y una sociedad libre, vagamente conciente de su propia opresión, dentro y fuera. He usado el término “estado de seguridad nacional” para describir sus estructuras de poder. Es una forma conveniente para englobar a los militares y a las comunidades de inteligencia, así como al mundo que se alimenta de ellos, como los contratistas de defensa y otros entes nebulosos y subterráneos. Sus rasgos fundamentales son el secreto, abundancia, independencia, poder, y duplicidad.

Prácticamente todo lo importante emprendido por las comunidades norteamericanas de inteligencia y militares en la pasada mitad del siglo, ha ocurrido en secreto. La iniciativa  de construir un arma atómica, mejor conocida como el Proyecto Manhattan, permanece como el gran modelo de todas las actividades siguientes. Por más de dos años, ni siquiera un solo miembro del Congreso supo de él, aún cuando su costo final excedió la entonces increíble suma de dos mil millones de dólares.

Durante y tras la Segunda Guerra Mundial, otros importantes proyectos como el desarrollo de armas biológicas, la importación de científicos nazis, experimentos terminales de control mental, intercepción nacional del correo y transmisiones por cable de una población involuntaria, infiltración en los medios de comunicación y universidades, golpes de estado secretos, guerras secretas, y asesinatos, todo tuvo lugar alejado no sólo del público americano, sino de la mayoría del Congreso y unos pocos presidentes. De hecho, varias de las agencias de inteligencia más poderosas fueron establecidas en secreto, desconocidas por el público o el Congreso por muchos años.

Desde los 40, el aparato de defensa e inteligencia de EE.UU. ha tenido más dinero a su disposición que la mayoría de las naciones. Además de los dólares oficiales, mucho del dinero es indocumentado. Desde sus inicios, la CIA se asoció en una variedad de “negocios” no registrados que generaron grandes sumas de efectivo. Las conexiones de la CIA con el crimen organizado global (y de hecho con el comercio internacional de narcóticos) han sido establecidas y documentadas por muchos años. Mucho del dinero original dado para funcionar a la comunidad norteamericana de inteligencia vino de familias americanas muy ricas y establecidas, las que han mantenido permanentemente interés en el financiamiento de las operaciones de la seguridad nacional importantes para sus intereses.

En teoría, la supervisión civil existe sobre el aparato de seguridad nacional de los EE.UU. El presidente es el comandante en jefe militar. El Congreso tiene supervisión oficial sobre la CIA. El FBI debe reportar al Departamento de Justicia. En la práctica, poco de esto se aplica. Una razón tiene que ver con el secreto. (...)

Un ejemplo escalofriante de tal independencia ocurrió durante los años 50, cuando el presidente Eisenhower efectivamente perdió el control del arsenal nuclear de los EE.UU. La situación se deterioró tanto que durante sus últimos dos años en la oficina, Eisenhower pidió en varias ocasiones una audiencia con el jefe del comando aéreo estratégico para saber cuál era el plan de retribución nuclear de Estados Unidos de América. Lo que finalmente supo en 1960, su último año en la oficina, lo horrorizó: la mitad del hemisferio norte sería borrada.

Si un reverenciado héroe militar como Eisenhower no pudo controlar el arsenal nuclear de Estados Unidos, ni recibir una respuesta clara del Pentágono, ¿qué podrían hacer los presidentes Truman, Kennedy, Johnson o Nixon hacer en situaciones similares?

El secreto, la abundancia y la independencia se suman al poder. Con los años, el estado de la seguridad nacional ha accedido a las más sofisticada tecnología aislada por millones de acres de tierra sin acceso o escrutinio público, a una capacidad ilimitada para fisgonear dentro de las fronteras de los EE.UU. y fuera de ellas, conducido acciones abiertas o clandestinas contra otras naciones, y seguido guerras sin un escrutinio serio de los medios. Nacionalmente, mantiene influencias sobre funcionarios elegidos y comunidades que esperan algunos de los miles de millones de dólares de la defensa (incluyendo científicos, universidades, etc).

El engaño es el elemento clave en la guerra, y cuando ganar es todo lo que importa, la moralidad convencional mantenida por las personas comunes se convierte en un impedimento. Cuando se toman juntas, los ejemplos de duplicidad oficial forman una única totalidad. Incluyen bocados selectos como la crisis de la guerra falsa de 1948, el fallo de misil a la medida demandado por la fuerza aérea durante los años 1950, los acontecimientos que cuidadosamente manejados condujeron a la resolución del Golfo de Tonkin... (...)

El secretismo proviene de un elemento penetrante y fundamental de la vida en nuestro mundo, que aquéllos en la punta del montón siempre tomarán las medidas que sean necesarias para mantener el status quo.

Los escépticos a menudo preguntan “¿Realmente crees que podrían esconder (cualquier cosa) por tanto tiempo?”. La pregunta en sí refleja la ignorancia de que el secretismo es una forma de vida en el Estado de Seguridad Nacional.  Sin embargo, la respuesta es sí, y no.

Sí, en el sentido de que los encubrimientos son procedimientos operativos estandarizados, frecuentemente desconocidos por el público por décadas. Pero también no, en que ... la información ha sido filtrada desde le principio. Es imposible cerrar completamente la tapa. La clave consiste en neutralizar y desacreditar la información molesta, a veces a través de la negación oficial, otras a través de enlaces en los medios de comunicación.

La evidencia (de una conspiración) sacada a nivel de filtraciones, con poca probabilidad sobrevivirán a su conflicto inevitable con la cultura oficial. Y el reconocimiento sobre la realidad (de la conspiración) sólo ocurrirá cuando la cultura oficial juzgue que valga la pena o sea necesario hacerlo. (No contenga su aliento).

Este es un fenómeno extendido que afecta a muchas personas, generando altos niveles de interés, ocurriendo en casi completo secreto, para objetivos desconocidos, por agencias desconocidas, con acceso a increíbles recursos y tecnología. Hace pensar y causa reflexión. [Richard Dolan]
Ahora, piense sobre la palabra “conspiración” una vez más y permítame enfatizar el punto clave: Desde un punto de vista histórico, la ÚNICA realidad es la conspiración. Secretismo, abundancia e independencia se suman al poder... El engaño es el elemento clave en la guerra, (la herramienta de las élites del poder), y cuando ganar es todo lo que importa, la moral convencional mantenida por personas comunes se convierte en un obstáculo. El secretismo proviene de un elemento penetrante y fundamental de la vida es nuestro mundo,  que aquéllos en la punta del montón siempre tomarán las medidas que sean necesarias para mantener el status quo.

¿Y cómo hacen eso? A través de la “cultura oficial”.

Y la cultura oficial, entendida de esta forma, desde la perspectiva de los grupos de élite que desean mantener el status quo de su poder, significa sólo una cosa: COINTELPRO. Y aquí no necesitamos mencionar específicamente al programa del FBI, sino al concepto del programa y su aplicación en nuestra sociedad, y la probabilidad de que éste haya sido el modo de controlar a los seres humanos posiblemente por milenios. Ciertamente Maquiavelo bosquejó los principios hace mucho tiempo, y poco ha cambiado desde entonces.

El hecho es que es casi un sistema mecánico que opera basado en la naturaleza psicológica de los seres humanos, la mayor parte de los cuales QUIEREN vivir en negación o necesitan vivir en negación para agradar a sus padres, a sus semejantes, a sus líderes religiosos, y sus líderes políticos. Después de todo, “si la ignorancia es la felicidad, es tonto ser sabio”. Esto es especialmente cierto cuando se toma en cuenta el instinto de supervivencia del ego. Si la cultura oficial dice que no hay un tercer hombre en el cuarto, y si funciona a través del sistema de creencias inculcado, existen pocas posibilidades de que el “sujeto” sea capaz de ver la fuente de los fenómenos en nuestro mundo. Siempre será un “tercer hombre invisible”.
Consideren también: aún si Dolan está escribiendo específicamente sobre Estados Unidos de América, en un mundo dominado por Estados Unidos, debe considerarse que se aplican presiones en todas partes dentro de este “Estado de seguridad Nacional” para cumplir con las demandas de Estados Unidos.

El lector quizás quiera echar una mirada a Cultura de Crítica: Un análisis evolutivo de la implicación judía en los movimientos intelectuales y políticos del Siglo Veinte de Kevin MacDonald donde verá que los "judíos étnicos tienen una influencia de gran alcance en los medios americanos, lejos más grande que cualquier otro grupo identificable. La extensión de la propiedad y de la influencia judías en los medios populares en los Estados Unidos es notable dada la proporción relativamente pequeña de la población que es judía”.

En otras palabras, Israel controla los medios para crear la “cultura oficial” de América para adaptarla a su propia agenda, incluyendo el hacer a los términos “teoría de la conspiración” y “antisemita” unos epítetos tan horribles ¡que nadie se atrevería a decir nada que le pusiera en riesgo de ser calificados así!

Existe hoy en día en nuestro mundo un culto secreto poderoso y peligroso.

Eso escribió Victor Marchetti, un antiguo oficial de alto rango de la CIA, en su libro La CIA y el culto de la Inteligencia. Este es el primer libro por el cual el gobierno de Estados Unidos acudió a una corte para censurarlo antes de su publicación. En este libro, Marchetti nos cuenta que HAY una “conspiración” que rige al mundo y que sus hombres santos son los profesionales clandestinos de la Agencia Central de Inteligencia (CIA). Citando a Marchetti:

Este culto es patrocinado y protegido por los funcionarios de nivel más altos de los gobiernos del mundo. Su membresía está compuesta por aquéllos en los centros de poder de gobierno, industria, comercio, finanzas, y trabajo. Manipula a individuos en áreas de importante influencia pública - incluso el mundo académico y los medios de comunicación. El Culto Secreto es una fraternidad global de una aristocracia política cuyo objetivo es seguir las políticas de personas o agencias desconocidas. Actúa encubierta e ilegalmente.

“La mayor amenaza a la democracia no viene de la extrema izquierda, sino de la extrema derecha, que puede comprar inmensas secciones de prensa y radio, y mantiene una campaña constante para manchar y desacreditar cualquier medida progresiva y humanitaria”. George Seldes

“Existe un gobierno en las sombras, con su propia Fuerza Aérea, su propia Armada, su propio mecanismo de financiamiento, y la habilidad para perseguir sus propias ideas de interés nacional, libres de todo control y balance, y libre de la misma ley”. Daniel K. Inouye, Senador de EE.UU.

"Algunos de los más grandes hombres en los Estados Unidos, en el campo de la manufactura y el comercio, temen a algo.  Ellos saben que en alguna parte hay un poder tan organizado, tan sutil, tan vigilante, tan entrelazado, tan completo, tan penetrante, que mejor no levantan la voz más allá de un murmullo cuando hablan para condenarlo”. Woodrow Wilson, The New Freedom (1913)

Recuerde: aquellos que están en la punta del montón, siempre harán lo que sea necesario para mantener el status quo y la forma en como esto se hace es a través de la “cultura oficial”, que es producto del COINTELPRO.

El arma más efectiva del COINTELPRO es el ridículo y el descrédito. Note que Marchetti precisa que esto se hace a través de la manipulación de individuos en áreas de la influencia pública importante, incluyendo el mundo académico y los medios de comunicación.

El punto fundamental es: si usted se compró el consenso emocionalmente manipulado "de la cultura oficial" de que no hay ninguna conspiración, que no hay ningún "Tercer Hombre," es muy probable que usted esté siendo manipulado a través del miedo al ridículo. Usted está en negación. Usted ha sido hipnotizado por las sugerencias de los hombres santos del Culto Secreto. Y ha decidido creerles en contra de sus propias observaciones y sentidos.

De un “experto” en mentiras:

El tamaño de la mentira es el factor definitivo de que se le crea, porque las vastas masas de la nación son, en el fondo de sus corazones, más fáciles de engañar de lo que son consciente e intencionalmente malos.
La primitiva simplicidad de sus mentes las hace víctimas más fáciles de una gran mentira que de una pequeña, porque usualmente dicen pequeñas mentiras, pero estarían avergonzados de decir grandes mentiras. Tal forma de mentir nunca cabría en sus cabezas. Nunca le darían crédito a otros sobre la posibilidad de tal gigantesca imprudencia como la revocación completa de los hechos.

Incluso las explicaciones los dejarían mucho tiempo en la duda y vacilación, y cualquier razón insignificante los dispondría para aceptar una cosa como verdadera. Por lo tanto siempre algo permanece y se pega de las más imprudentes de las mentiras, un hecho que todos los grupos y los individuos afectados por el arte de la mentira en este mundo sabe demasiado bien, y por lo tanto no se detienen ante nada para conseguir este fin.
~ Adolph Hitler, Mein Kampf


Ahora, permítame retroceder un poco. El 14 de septiembre de 2001, sólo unos días después del ataque terrorista, leí un curioso artículo de un sitio de noticias ruso, www.strana.ru, que llamó mi atención y me dejó extrañamente inquieta. Era una entrevista con un ex oficial de alto rango Ruso, y especialista en los servicios secretos rusos, y que fue traducida para nosotros por un lector que nos la envió, y que reproduciré tal como la leí, con subrayados y énfasis que agregué para mostrar aquellos puntos que encuentro más interesantes:


Los actos de terrorismo llevados a cabo el 11 de septiembre en Estados Unidos de América, y sus consecuencias son comentadas en una entrevista con Andrey Kosyakov, ex asistente del presidente del Congreso Ruso, un especialista en seguridad internacional.

P: ¿Qué sugiere que el terrorismo en EE.UU. fue bien planeado por adelantado?

R: Primero, los conspiradores poseían la habilidad profesional para volar un avión. Tuvo que haber por lo menos cuatro de ellos con sustitutos a mano en el evento que alguno de ellos fallara. Hay altas probabilidades de que el secuestro de un avión fracase, por lo que deben haber secuestradores y/o pilotos de respaldo.

En segundo lugar, todos los participantes en la operación estaban listos para sacrificarse, y tales personas no son fáciles de encontrar.

Finalmente, los tiempos de salida de los aviones desde cuatro diferentes puntos fueron coordinados minuto a minuto. Esto quiere decir que las rutas y los tiempos eran bien conocidos por adelantado, y que esos vuelos fueron seleccionados específicamente por sus rutas y horarios.

Todo esto es suficientemente complicado para necesitar un largo período de planificación.

P: ¿Y cuánto tiempo, en su opinión, tomaría planear algo así? ¿Se necesitaría una organización de qué tamaño? ¿Podría, por ejmplo, el ejército rojo realizar una operación así? Algunos analistas dice que sólo una organización nacional podría hacer algo así.

R: En cuanto al tiempo de preparación, requeriría meses. Y tal organización debe ser poderosa.

Pero la participación de una organización nacional, tal como un gobierno, es bastante dudosa.

Le aseguro que recursos Nacionales no han sido usados aquí.

Ningún servicio secreto arriesgaría a sus operativos de esta manera. Ellos gastan mucho tiempo y dinero entrenando a sus agentes. Sin embargo, si el presidente Bush hubiese sido el blanco, entonces podría sospecharse de un servicio secreto de alguna organización. Pero aquí, el blanco era diferente: civiles.

Respecto al Ejército Rojo, no calza por una simple razón: está compuesto mayoritariamente por orientales y es demasiado fácil distinguir un japonés de un americano.

P: Entonces, ¿qué concluye de todo esto?

R: Verá, analizando la situación, me impactó un hecho significativo: es sabido que hubo llamadas desde teléfonos celulares en el avión. Una de las personas que llamó era un periodista profesional. Y aún así ninguna de las personas que llamó dijo que habían sido secuestrados por “terroristas musulmanes”. Aparentemente no había nada inusual en la apariencia de los secuestradores. No hubo intentos de describirlos. Nadie dijo: “Terroristas musulmanes secuestraron el avión”, que lógicamente sería el primer comentario de este periodista SI ES QUE hubiese sido aparente que los secuestradores eran extranjeros. Obviamente no había nada inusual en ellos en términos de apariencia, acento, pronunciación, u otros factores similares.

P: Pero, organizaciones secretas podrían ocultar estas cosas ¿no?

R: Todas estas llamadas fueron privadas. Ni siquiera el FBI pudo suprimir el hecho de que se hicieron estas llamadas. Así, la conclusión que me viene a la mente, es que la apariencia exterior de los secuestradores no era diferente de los demás pasajeros. Sólo en ese caso las llamadas habrían identificado a los secuestradores. Esto sugiere que los secuestradores tenían apariencia europea.

También es sospechoso el hecho de que los conspiradores dejaron una gigantesca “pista” en el automóvil del aeropuerto con una copia del Corán e instrucciones para pilotar un avión en árabe.

Ahora mire, ninguna organización se atribuyó la responsabilidad. Esto quiere decir que los terroristas quieren ocultar su identidad.

Con todo el control y profesionalismo que mostraron ¿cómo pudieron cometer semejante error?

Esto no calza con la perfección del resto de la operación.

Todo esto quiere decir que los criminales quieren crear una pista falsa.

De esta manera, los servicios secretos han sido inducidos astutamente a buscar a “terroristas musulmanes”.

P: Pero la práctica del auto sacrificio ¿no es típica de la cultura musulmana?

R: Tiene toda la razón. Pero ¿quién le dijo que los que murieron eran musulmanes?

De esta forma podemos limitar el radio de búsqueda.

En base a la información que poseemos, por análisis, podemos concluir que aquellos que lo hicieron eran americanos o europeos que eran seguidores del Islam radical.

Fueron manipulados de manera que los verdaderos criminales se ahorraran la persecución.

Es completamente claro que esta es una operación de múltiples fases. (…) Al parecer el blanco era precisamente Estados Unidos de América; precisamente civiles.

P: Pero, recordamos que algunos analistas decían que si George Bush hubiese estado en la Casa Blanca el 11 de septiembre, entonces el avión habría apuntado a la Casa Blanca en lugar del Pentágono.

R: Esto es altamente improbable. En ese caso los blancos primarios habrían sido la Casa Blanca o el Pentágono, no la población civil.

De hecho, tras un primer hecho terrorista exitoso, las probabilidades de éxito de los demás disminuyen.

Ya ve que la última acción fracasó al estrellarse el avión en Pittsburgh. Lo más seguro es que lo derribaron. Aún cuando es algo dificil de admitir, fue lo correcto.

Así que es claro que los blancos principales eran los civiles.

Hay una fórmula que es parte de la mentalidad del terrorista: la población civil en países democráticos es responsable de las acciones de sus gobiernos. Los terroristas aceptan y usan esta fórmula. Por lo tanto, los siguientes actos terroristas seguirán el mismo patrón. Obviamente, ocurrirán el miércoles o jueves de la próxima semana. ¿Por qué? No quiero explicar la lógica terrorista. Pero se basa en cierto sentido de “virtud”.

Pero quisiera repetir esto: el hecho de que ningún terrorista se haya adjudicado la responsabilidad, nos dice que volverán a matar una y otra vez hasta que el siguiente estado de conflicto global sea alcanzado. Este es precisamente el objetivo de estas acciones. Sólo entonces revelarán su identidad para conseguir seguidores.

P: ¿Cómo es que los servicios especiales DE EE.UU. fallaron para detectar tal acto terrorista?

Le daré dos ejemplo: Hace seis meses el reconocimiento israelí realizó estudios sobre el uso de objetos aéreos para realizar actos terroristas.
Es seguro que los americanos tenían acceso a estos estudios. Pero parece que no les entró en la cabeza como para aplicar esta información de modo defensivo.

Y el otro. En marzo de 1991, le contamos a Korzhakov sobre la situación que llevaría al golpe de estado de septiembre. Predijimos que todo ocurriría en septiembre. Todo sucedió exactamente como lo describimos, sólo que pasó un mes antes: en agosto. Nadie prestó ninguna atención. Esto quiere decir que cuando hay predicciones de escenarios que parecen improbables, nadie los toma en serio, especialmente los servicios secretos. Es por ello que Putin dice que lo que se necesita es la unión de todos los servicios secretos de todas las naciones.

P: ¿Cuál es la probabilidad de que los servicios secretos norteamericanos encuentren al líder de esta operación, o de que simplemente presenten a la sociedad una falsificación?

R: Muy alta. Hay personas, hay apartamentos localizados, lo que significa que ciertamente hay rastros. Siguiendo estos rastros, uno puede encontrar al líder.

P: ¿Y quién es? ¿Bin Laden?

Difícilmente.

Sí, hubo esta intercepción de su conversación con alguien, donde reportan la destrucción de dos blancos. Esto ha sido visto como una confirmación indirecta de su participación. Pero él no es un ideólogo. Es demasiado conocido. Y el que organizó todo eso es demasiado listo como para ser notado.

Jamás.

Ahora, recuerde, esta entrevista con un experto en inteligencia se realizó pocos días después de los ataques del 11 de septiembre. Varios puntos de este artículo me hicieron pensar. Éstos son: los ataques fueron contra civiles, blancos que son altamente simbólicos para el americano común. En otras palabras, el pueblo estadounidense era el verdadero blanco, pero no de la forma que usualmente pensamos.  Fue intencionalmente hecho para que cada estadounidense se llenara de miedo y rabia, de modo que cualquiera que apareciera como “hombre fuerte”, apuntando un dedo acusador y declarando que iba a ir tras ellos, fuera capaz de hacer cualquier cosa que se le antojase. Y es exactamente lo que George W. Bush hizo. El tipo de la inteligencia rusa dijo que era obvio que el ataque fue organizado por una “organización muy poderosa” que desea culpar a los musulmanes de estos ataques, sembrando pistas falsas. Y también señala que, debido a que los ataques fueron tan cuidadosamente planeados, era obvio que los planificadores eran demasiado listos como para hacerse notar. Y ciertamente mucho más listos para dejar pistas falsas como los pasaportes y los videos de “cómo volar” en árabe. De hecho, los pasaportes y videos fueron salidas fáciles al hecho de que fueron plantados para acusar falsamente a los terroristas islámicos.

Otra cosa que me impactó fuertemente fue su comentario que subraya que el reconocimiento israelí llevó a cabo estudios sobre el uso de material aéreo para conducir actos terroristas, seguidos de la aseveración de que “ciertamente los americanos tenían acceso a estos estudios”.

Así, comencé a pensar sobre lo que el tipo de la inteligencia estaba diciendo más profundamente aún cuando le aseguró al entrevistador que no hubo mano de “servicios nacionales” en esto.

(En cuanto al comentario del tipo de la KGB sobre el derribo del cuarto avión secuestrado, ver: clip de vídeo: Como las autoridades respondieron: un análisis conciso de los acontecimientos de http://www.itn.co.uk/news/ondemand/video/)

Este experto en inteligencia ruso hizo una pregunta capciosa: “¿Cómo podrían los servicios especiales de los EE.UU no descubrir tal acto terrorista?"

Esta aseveración me impactó como uno de los trozos más inteligentes del comentario sobre los ataques del 11 de septiembre que salieron EN EL MOMENTO, surgiendo por sobre los discursos histéricos sobre Osama y aquellos musulmanes repugnantes como una pequeña isla de la cordura.

Lo que encontré más interesante era QUIÉN exactamente señalaba más vigorosamente al Islam Radical: un verdadero coro griego conducido por un antiguo animador, nuestro propio George Bush y los Agitadores.

Cuando vemos el hecho de que, desde el mismo comienzo, este evento ha sido comparado con “Pearl Harbor”, debemos preguntarnos si no es alguna clase de “firma”.

Recuerdo que en 1986, cuando me encontré con evidencia documentada de que Estados Unidos sabía del ataque a Pearl Harbor antes de que sucediera. Quedé conmocionada. No sólo el gobierno no hizo nada para prevenirlo, sino que no alertaron a aquellos que serían atacados. La pérdida de vidas americanas fue horrenda. Y la culpa yace en la puerta de los líderes de América. Incluso hay evidencia de que manipularon la situación, en los más altos niveles, para asegurarse que el ataque se llevara a cabo.
¿Por qué?

Bueno, para que Estados Unidos entrara a la guerra, por supuesto. La guerra es un gran negocio. Cuando tienes una economía en recesión, dedicarse un poquito a la guerra siempre es la respuesta. En tiempos antiguos, era el negocio del día: ir a la guerra, matar hombres, capturar mujeres y el tesoro del enemigo, y volver a casa hasta que lo hubieses gastado todo y te hubieras cansado de la mujer, para volver a salir y hacer todo de nuevo. Incluso Herodoto entendió que esta era la razón de las guerras. Y los humanos no han cambiado en nada. Por lo menos aquellos que buscan posiciones de poder.

¿Es posible que el gobierno de nuestro país tuviese algún indicio de que ocurrirían los eventos del 11 de septiembre?

Después de examinar la evidencia disponible, de hecho, parece que es cierto.
Y si es así ¿es posible que no hicieran nada?

Una vez más, parece que también es cierto. Y cuando finalmente despertaron de sus juegos de guerra y clases de lectura, la única cosa que hicieron fue exactamente lo opuesto a ir al meollo del asunto, tratando de encontrar a los verdaderos culpables, y en su lugar, fueron tras pistas de bandera falsa que fueron dejadas para pervertir y negar a cualquiera el derecho de cuestionar las conclusiones que propagaron tan vigorosamente.

Bien, seguro, tales pistas podrían pervertir al ciudadano medio. Ellos no podrían ser conscientes de las llamadas "operaciones de Bandera Falsas." No han sido educados en los caminos de la inteligencia y no saben sobre todas las manipulaciones diabólicas que ocurren todo el tiempo en el mundo del espía contra el espía.

Pero seguramente, el presidente de la mayor nación en la Tierra no va a caer en tales tonterías como el video de "como volar" en árabe ¿verdad?

Por lo visto sí.

Así que tenemos una administración que no actúa cuando y como debiera, antes o después del ataque.

¿Es una coincidencia?

Leemos reportes interminables de esto esparciéndose como el fuego en la web. Una docena o más de comentaristas de mayor o menor prestigio simplemente no creen en las “fallas de inteligencia” que esta administración esgrime para explicar cómo y por qué George y Compañía fueron atrapados con los pantalones abajo. Mucha, mucha gente tiene la certeza de que el gobierno no sólo sabía del ataque, sino que lo permitieron para sus propios nefastos propósitos; que es un nuevo Peral Harbor o incluso un nuevo incendio de Hitler en el Reichstag. Así que tenemos dos fuerzas opuestas: la administración respaldada por los medios de comunicación masivos, contra un porcentaje creciente de la población que clama que no hubo fallas de inteligencia, que el gobierno deliberadamente permitió el ataque, y que es parte del itinerario para imponer un Gobierno Único Mundial sobre todos nosotros, para reducir nuestras libertades, y atraparnos en un estado fascista.

Por su lado, George Bush y su administración dicen que debemos aceptar nuevas y restrictivas leyes para “protegernos” (no importa que la INTELIGENCIA estuviera disponible, y que fue el gobierno el que falló en hacerle caso y hacer más seguro a Estados Unidos de América), hacer cambios significativos en la forma en que el país hace negocios, y sin duda, necesitamos una pequeña guerra aquí y allá para emparejar las cosas (sin mencionar la economía). Y todos los Joe Cervezas del mundo quizás se lo compren.

Todas las abuelas Sally Inversionista están sentadas en casa, pegadas a sus televisiones, esperando que el Tío Sam se haga cargo, les tire una bomba atómica a los afganos, le de a Saddam una zurra, arrase con los irakíes, y a cualquiera que alguna vez les haya ayudado, y que aprueben todas las leyes necesarias para asegurar la seguridad de esta gran nación. No importa si esto incluye pasar a una sociedad sin efectivo y con microchips implantados bajo la piel, de modo que todos sean rastreables y así asegurarse de que no están cometiendo actos terroristas en su hora de la almuerzo.

Hay un dicho atribuido a Franklin Roosevelt: “En política, nada sucede por accidente. Y si pasa, puedes apostar a que fue planeado de esa forma”. Quizás lo dijo, quizás no. El caso es que cualquiera que estudie profundamente la historia puede darse cuenta que está bastante cerca de la verdad. También tuve una conversación con un amigo que fue entrenado en la inteligencia militar y me dijo que una de las primeras reglas es observar la situación COMO ES, y luego extrapolarla a quién sale beneficiado. Así, estos dos principios estaban más que presentes en mi mente mientras consideraba todos los datos. Claramente, los ataques del 11 de septiembre son “eventos políticos”.

La situación presente es algo compleja. Pero nos hemos dado cuenta que se ha vuelto compleja DESPUÉS de los hechos. Es sólo la especulación descabellada y el constante juego entre agendas y contra agendas las que tienden a oscurecer los elementos esenciales del asunto. Existen grupos que le dan y dan a un “destello de luz” que fue emitido entre los dos aeroplanos que se estrellaron en el WTC, y que esto prueba que se lanzó una especie de misil. Es una idea interesante, pero ni siquiera da para “teoría” porque existen otras posibles explicaciones para ese destello, incluyendo descargas eléctricas entre el avión y el edificio en el momento que estuvo lo suficientemente cerca para hacer “tierra”.

Hay grupos que le dan gran importancia a las supuestas “vainas” bajo el avión que impactó al WTC. Fácilmente podemos desechar esto al examinar cuidadosamente las fotos de la parte de debajo de ese particular tipo de avión.

Luego, está el grupo que en mi opinión se lleva la torta: la gente “holograma”. Eso es una de las cosas más tontas que circulan. Eso no quiere decir que no crea que existe la tecnología para hacer hologramas, y que podrían ser usados de muchas formas, pero no creo que los hologramas se fotografíen muy bien dado que son producidos con luz, además de que existen incontables videos que repiten el choque de los aviones en las torres del World Trade Center.

Entonces volvamos al punto cero de la situación, veamos el evento, en sí mismo, y hagámonos la primera pregunta importante: ¿Quién se beneficia?

Es fácil ver que el Complejo Industrial-Militar (MIC) en Estados Unidos de América ha sido el primer beneficiario, junto con Israel. De hecho, los dos son casi la misma criatura, por lo que es difícil pensar en ellos como entidades separadas. Podría sugerirse que, al enfocar la furia ciudadana de los Estados Unidos en contra de los Musulmanes, Israel obtiene un poderoso respaldo para sus objetivos expansionistas, y con mucho del MIC en su bolsillo, tiene el dinero para hacer lo que quieran: el dinero de los estadounidenses que pagan impuestos.

También observamos los eventos en Israel durante los meses previos al ataque al WTC: mucha gente estaba dejando de apoyar a Israel y había un creciente sentimiento de descontento entre los pueblos de muchos países, que pensaban que Israel simplemente había ido muy lejos en sus acciones en contra de los Palestinos. Todos estaban cansándose del constante acoso a los palestinos, de los constantes ataques en contra de cualquiera que dijera una sola palabra en contra de las ambiciones políticas de Israel, a los que (si no apoyaban cada cosita dicho y hecha por Israel) eran acusados de “antisemitas”.

En resumen, Israel estaba perdiendo su ventaja apoyada en la culpa colectiva mundial. Las simpatías ahora se estaban volviendo en su contra, y a favor de los palestinos.

Así pues, después de que esos repugnantes islámicos fundamentalistas atacaran a Estados Unidos de América, Israel tuvo de su lado al matón más grande en el barrio global. Despotricando repetidamente lo malvados que son los musulmanes, cuán fanáticos, crueles y distintos son, todo el mundo se alineó con el modo de pensar israelí y le ayudaron a encontrar la "solución final" para Palestina y los demás árabes.

¡Cielos, sombras de la Alemania Nazi yendo tras los judíos!

De esta manera vemos que el principal “beneficiario” de los ataques a las torres del WTC es Israel.

Hay evidencia dura que apoya este punto de vista. Veamos:

El 10 de septiembre de 2001, la escuela de estudios avanzados del ejército publicó un informe escrito por oficiales de élite del ejército de los EE.UU., que fue publicado justo antes del 11 de septiembre. El informe dio la siguiente descripción del Mossad: "Comodín. Despiadado y astuto. Tiene capacidad para atacar a fuerzas de los EE.UU. y hacerlo pasar por un acto Palestino/Árabe." [Washington Times, 10 sept. 2001]


Hmmm... supongo que la pandilla de Bush no leyó ese pedazo de Inteligencia. Estaban demasiado ocupados leyendo “la inteligencia cocinada” que decía que Saddam Hussein tenía armas de destrucción masiva. Por sí misma, la cita de la escuela del ejército no significaba mucho, pero según las cosas se desarrollaban tras el 11 de septiembre, más piezas se agregaron al puzzle. No fue hasta el 2 de junio de 2003 que el cuadro comenzó a tener sentido. Ese día estaba revisando los reportes de noticias y se me cruzó un artículo bastante mundano que me dejó pensando. Lea mi artículo: El MOSSAD y las compañías de mudanzas para más detalles. Esta colección de datos (créanme, hay una tonelada de material sobre este tema) parecen apoyar la idea de que el MOSSAD podría, de hecho, haber estado profundamente implicado en los ataques del 11 de septiembre al World Trade Center y que el Régimen de Bush no sólo fue cómplice al ordenar a los militares de EE.UU. y a los servicios de inteligencia que “se quedaron quietos”, sino que estaban directamente involucrados en los planes como la evidencia de la relación entre Bob Graham y Mahmoud Ahmad lo demuestra.



Ahora, pongamos las tachuelas.



El 11 de septiembre de 2001 el ataque al World Trade Center fue seguido por cientos de millones de personas en el mundo a través de la televisión. Todos estaban conmocionados por el horror del ataque. Las cadenas de televisión transmitieron los videos del ataque una y otra vez con muy poco reporteo debido a que nadie realmente sabía qué decir; fue demasiado horrible e inesperado. Y todo el tiempo en que el ataque se mostraba repetidamente, no hubo ninguna explicación del evento porque nadie sabía ningún detalle.


Durante los siguientes días, trozos y piezas de información fueron liberadas a la prensa por oficiales del gobierno, los reportes fueron publicados y retirados, y la mayoría de las noticias se concentraron en los frenéticos esfuerzos de rescate. En los siguientes meses, más información fue liberada en trozos y pedazos, pero de nuevo, poca gente estaba prestando atención a los datos porque, para entonces, el shock se había transformado en terror.


Los meta-hechos son los varios cientos de personas que murieron en Estados Unidos de América el 11 de septiembre de 2001, y que Estados Unidos invadió Afganistán e Irak como resultado, asesinando a cientos de miles de seres humanos, incluyendo la matanza o mutilación de cientos de sus propios ciudadanos.


Los eventos del 11 de septiembre, sin embargo, siguen en una confusa maraña de contradicciones que sólo han sido exacerbadas por los así llamados informe oficial del 11 de septiembre. Sin embargo, el público de los Estados Unidos ha aceptado, en su mayor parte, la versión de la "cultura oficial" de los ataques. El alegato de que la "seguridad nacional" requiere que las autoridades encubran muchos de los datos sobre este crimen se acepta casi indiscutiblemente. Es realmente absolutamente asombrosa cuan POCO el estadounidense promedio realmente sabe sobre los acontecimientos de ese día, incluso si usted restringe su definición de "acontecimientos" a lo que fue divulgado por los medios.


El hecho más problemático de todos es que la versión oficial que sale de los reportes noticiosos y de la información publicada por los funcionarios de gobierno no resiste ni siquiera el escrutinio más precipitado.


Lo que más molesta es que, considerando el hecho de que los ataques del 11 de septiembre han sido los crímenes más descarados en la historia estadounidense, no hubo una adecuada investigación forense. No hubo un Sherlock Holmes a mano para usar su lupa y sus conocimientos sobre los distintos tipos de cenizas de cigarrillos; no hubo un Hércules Poirot llamado a ejercitar su materia gris; no hubo un Columbo murmurando aparentemente inocuas preguntas para sacar de quicio a los perpetradores. (Este también fue el caso del asesinato de JFK. La escena del crimen fue violada tan rudamente antes de que se realizara una investigación apropiada que ya no hubo posibilidad de encontrar pruebas).


Uno pensaría que en el país más grande y poderoso del mundo la investigación habría sido la más cuidadosa y científica que jamás se hubiese realizado.


Pero no fue el caso.


A pesar los ataques del 11 de septiembre fueron claramente crímenes de asesinatos masivos, ningún esfuerzo se realizó para preservar la integridad de las escenas del crimen, y evidencia esencial fue eliminada como basura. El ex alcalde de Nueva York, Rudoplh Giuliani contrató dos grandes firma británicas de construcción para supervisar lo que muchos expertos consideran una criminal destrucción masiva de evidencia. El editor en jefe de la revista Fire Engineering (Ingeniería de fuego), William A. Manning, publicó un llamado urgente a la acción a los bomberos de América a finales del 2001, pidiendo una investigación forense y exigiendo que el acero del sitio fuera conservado para permitir a los investigadores determinar qué causó el colapso. Eche un vistazo aquí para algunos comentarios sobre la destrucción de pruebas y pruebas de la destrucción.


Sólo como ejercicio, asumamos que los teóricos de conspiración están en lo correcto y el gobierno miente y encubre la verdad de los ataques del 11 de septiembre en parte o completamente. Sin ninguna evidencia real, sin una verdadera investigación imparcial ¿qué tenemos para continuar?


Verdaderamente, no podemos hacer mucho más que observar el comportamiento de todos los partidos antes, durante y después del acontecimiento. Pero aunque tengamos muy poco en la senda de las pruebas forenses, todavía podemos afirmar:


Cuando eliminas lo imposible, cualquier cosa que quede, no importa si es improbable ¡Debe ser la verdad! - Arthur Conan Doyle

Contrariamente a aquellos que dicen que no hubo ningún avión de pasajeros, que todo fue un holograma, parecer ser más que claro que jets comerciales impactaron a las torres gemelas del World Trade Center, exactamente como lo describieron muchos testigos y como lo confirmó el gobierno. Estaba en videos, y en mi opinión simplemente no podemos refutarlo. Pasó, y todos lo vieron.

Pero eso no significa que un Boeing 757 comercial chocó con el Pentágono.

¿Por qué digo esto?

Porque los jets comerciales fueron VISTOS estrellándose en el WTC, una y otra vez en televisión, lo que podría haber “condicionado” fácilmente al público a creer que el mismo tipo de nave impactó al Pentágono cuando el gobierno les dijo que este era el caso, apoyados por “testigos” que también eran funcionarios de gobierno.

Estudios del cerebro muestran que las sugerencias hechas en un periodo de dolor o conmoción, se transforman en RECUERDOS. El cerebro “atrapa” las ideas asimilándolas en momentos de dolor o conmoción, en “patrones sinápticos de pensamiento/recuerdos” permanentes.

Las condiciones que rodean al 11 de septiembre eran perfectas para crear impresiones y recuerdos específicos, manipulando las mentes de las masas al crear eventos aterradores y con la barrena de los medios.

Entonces, dado que tenemos imágenes en video de los aviones comerciales chocando con las torres, tenemos certeza de que esto sucedió. El tema del colapso de los edificios es distinto y ciertamente sugiere una planificación anterior para asegurarse que los edificios no sobrevivieran al impacto, y que el colapso fuera dramático y terrorífico.

Ahora volvamos al ataque contra el Pentágono. Este es un poco más problemático.
La agencia de noticia Reuters fue la primera en la escena del ataque al Pentágono. Basados en la información que recolectaron de testigos oculares, dijeron que el Pentágono había sufrido daños debido a la explosión de un helicóptero. Associated Press confirmó esto con el consultor del partido demócrata, Paul Begala.

2:41:05 PM "El Pentágono está siendo evacuado en espera de un ataque terrorista. Se cree que se ha iniciado un fuego dentro del edificio" -TCM Breaking News (11/9/01)

2:47:43 PM "Hay reportes que dicen que un helicóptero se estrelló en el Pentágono. Un testigo ocular dijo que vieron un helicóptero volando en círculos sobre el edificio y tras desaparecer por detrás, ocurrió una explosión" -TCM Breaking News (11/9/01)

2:52:26 PM "Paul Begala, un consultor Demócrata, dijo que presenció una explosión cerca del Pentágono poco después de que dos aviones se estrellaran en el World Trade Center. ‘Fue una bola de fuego tremenda, una inmensa bola naranja de fuego’, dijo Begala. Dijo que otro testigo le contó que un helicóptero había explotado". -TCM Breaking News (11/9/01)

Poco después el Departamento de Defensa declaró que un avión estaba involucrado. Nuevos “testigos oculares” aparecieron apoyando la versión oficial, y contradiciendo a los primeros testigos.

Fred Hay, asistente del senador Bob Ney, fue el primero en decir que vio caer a un Boeing mientras conducía por la carretera cercana al Pentágono. El senador Mark Kirk dijo que estaba dejando el estacionamiento del Pentágono luego de un desayuno con Donald Rumsfeld, y declaró que un avión grande se estrelló dentro del Pentágono.

Fue unas cuantas horas antes cuando el Presidente de los jefes conjuntos de personal, General Richard Myers, declaró que el “avión suicida” era un Boeing 757, AA vuelo 77, que había despegado desde el aeropuerto de Dulles en Washington D.C. hacia Los Angeles, y del cual se había perdido contacto a las 8:55 a.m.

Los controladores de tráfico aéreo dijeron que a las 8:55 a.m. el Boeing vuelo 77 descendió a 29,000 pies y no respondió a sus instrucciones. Fue cuando su radiofaro se silenció. Asumieron una falla eléctrica. El piloto no le respondía, pero aparentemente fue capaz de encender su radio intermitentemente, lo que les permitió escuchar una voz con fuerte acento árabe que les amenazaba. El avión hizo un giro “de vuelta a Washington” y luego se perdió su rastro.

Los controladores notificaron a los cuarteles de la FAA que se sospechaba de un secuestro. El equipo de la FAA dijo que, en medio del pánico de ese día, pensaron que este mensaje era otra notificación sobre el segundo avión que impactó al WTC. Sólo tras media hora se dieron cuenta de que, de hecho, era un tercer avión. Eso quiere decir que alrededor de las 9:24 se dieron cuenta de que tenían un tercer problema.

El General Richard Myers, vicepresidente de los jefes conjuntos de personal, dijo que previo al choque en el Pentágono, los oficiales militares habían sido notificados que otro avión secuestrado se dirigía desde el área de Nueva York a Washington. Dijo que asumía que el avión secuestrado era el que había impactado al Pentágono, aun cuando no podía estar seguro". -TCM Breaking News (11/9/01)

El 13 de septiembre, el General Myers no pudo dar un reporte al senado sobre las medidas defensivas tomadas para interceptar el Boeing. Con base a su testimonio, el comité del Senado para los Servicios Armados determinó que ningún intento de intercepción fue realizado.

El NORAD inmediatamente saltó y dijo “¡No fue así!”. Publicaron un comunicado de prensa  al día siguiente, alegando que sólo habían recibido la alerta del tercer secuestro a las 9:24 y que inmediatamente habían ordenado que dos F-16 despegaran desde la base de Langley en Virginia para interceptar al vuelo 77. PERO, decían, la fuerza aérea no sabía su localización ¡y partió en la dirección equivocada! Aparentemente, un transporte militar despegando de la base presidencial de Saint Andrews detectó al Boeing por casualidad, pero ya era demasiado tarde.
Un Boeing 757-200 mide 47 metros de largo y tiene una envergadura de 38 metros. Con carga completa pesa 115 toneladas y viaja a 901 kilómetros por hora.

Entonces, las declaraciones anteriores simplemente no son plausibles. ¿Esperan que creamos que el sistema militar de radares de los Estados Unidos no pudo localizar a un Boeing con un rango de unas cuantas decenas de millas? ¿El radar militar de la nación más poderosa de la tierra? ¡¡¿¿¿Y más encima, que un Boeing (una ballena voladora) pudo maniobrar y eludir a dos jets caza???!!

Se sabe que los arreglos de la seguridad que protegen a Washington fueron revisados después de que un avión se las arreglara para aterrizar en el césped de la Casa Blanca en 1994. También se sabe que éstos, aún cuando la mayoría son secretos, incluyen cinco baterías de misiles antiaéreos instalados encima del Pentágono y aviones de combate estacionados en Saint Andrews. ¿Aún así esperan que creamos que "el Pentágono simplemente no estaba enterado" que un Boeing secuestrado se dirigía hacia ellos? ¿Qué "nadie esperaba algo así”?
Esencialmente, el cuartel general de la nación más poderosa de la tierra ha sido incapaz de defenderse a sí mismo.

Aún más, reportes de extraños sucesos en el Pentágono siguieron apareciendo hasta mucho más tarde ese día:

4:05:16 PM "Un segundo avión chocó en el edificio del Pentágono. No se sabe si es el avión que fue secuestrado desde el aeropuerto de Boston hace poco, el cuarto de tales aviones en ser usados en este importante ataque a los Estados Unidos. Anteriormente un pequeño avión se incrustó en el edificio y explotó en una llamarada". -TCM Breaking News (11/9/01)

4:17:03 PM "Parte del edificio del Pentágono a las afueras de Washington ha colapsado. Fue impactado por dos aviones aparentemente secuestrados por terroristas en Boston". -TCM Breaking News (11/9/01)

6:40:29 Jets caza de la policía militar se encuentran patrullando los cielos de Washington luego que un jet secuestrado por terroristas impactara el Pentágono. Un avión se estrelló en un helipuerto cerca del Pentágono y de la Casa Blanca. El Pentágono ha recibido un impacto directo de un avión. El centro nervioso del ejército norteamericano estalló en llamas y una parte de uno de los lados de la estructura de cinco lados colapsó cuando el avión se estrelló. Explosiones secundarias han sido reportadas luego de los ataques y grandes nubes de humo llenan el cielo hasta el rio Potomac. Las autoridades inmediatamente han comenzado a desplegar tropas, incluyendo un regimiento de infantería liviana. El General Richard Myers, vicepresidente de jefes conjuntos, declaró que antes del ataque oficiales militares fueron notificados de que un avión se dirigía desde Nueva York al área de Washington. Dijo que asumía que el avión secuestrado era el que impactó al Pentágono, aún cuando no podía estar seguro”. -TCM Breaking News (11/9/01)

Los miembros de la prensa fueron mantenidos lejos de la escena porque “estorbarían en las labores de rescate”. Sin embargo, la Associated Press obtuvo fotos tomadas por particulares desde un edificio cercano. Es gracias a estas fotos que surgen las preguntas sobre el ataque al Pentágono.

Luego de toda esta confusión, finalmente se dijo oficialmente que la explosión en el Pentágono fue causada cuando el vuelo 77 de American Airlines, un vuelo comercial de 100 toneladas, chocó a nivel del suelo en la única sección del edificio que estaba siendo renovada para ser más “resistente a explosiones”, y que albergaba a la menor cantidad de empleados. Se dijo que el vuelo 77 fue secuestrado por cinco terroristas islámicos árabes en una aparente misión suicida , matando a las 64 personas abordo. Las fuentes oficiales declararon que las grabaciones del vuelo 77 y los restos de todos los 64 pasajeros, menos uno, fueron encontrados en la escena del choque.

Antes que todo deberíamos examinar el “estado mental” de los terroristas que quisieran infligir el máximo daño posible. Ciertamente, si una organización fundamentalista islámica terrorista se las arregló para apoderarse de un avión, y luego ponerlo cerca del Pentágono, ¡que gran golpe habría sido! ¡Imagínelo! Ser capaz de destruir completamente el centro nervioso del odiado “Satán” que es, por cierto, la forma en que estos fundamentalistas ven a Estados Unidos.

Ok, entonces estos llamados terroristas se las arreglaron para destruir el “símbolo comercial” de los Estados Unidos, o eso nos dijeron. Y ahora vemos que tenían otro objetivo en mente: el símbolo de la supremacía militar. Se nos ha dicho que tenían habilidades superiores para volar y sin embargo, de alguna manera, desperdiciaron su oportunidad. Le dieron a la parte del Pentágono que estaba menos ocupada.

¿Qué?

Ups.

Simplemente considere esto: para causar el mayor daño al Pentágono, el avión debió zambullirse directamente en el techo del Pentágono. El edificio es un blanco bastante grande. Cubre una superficie de 29 acres, y debería haber sido un “tiro” fácil. Por el contrario, lo que sucedió no tiene ningún sentido desde la perspectiva de los terroristas (estamos asumiendo que hubo verdaderos terroristas “que odian la libertad”), que ahora tenían la oportunidad de hacer un verdadero daño: eligieron golpear un solo lado, de una altura de sólo 25 metros, en lugar de apuntarle a un blanco de 29 acres. ¿Ah? ¿Qué pasa con eso? ¿Terroristas que pueden volar un 757 como un corredor profesional de rodeo maneja a un caballo, y optan por un daño mínimo?

Disculpen, pero no calza.

Los fundamentalistas islámicos que se apoderaron del Boeing con un odio ardiente en su corazón contra los Estados Unidos y de "sus libertades",  con infalible exactitud dirigieron a esa ballena voladora en una trayectoria de vuelo como si fueran a aterrizar en el césped del Pentágono. De una posición horizontal, este asombroso Boeing bajó casi verticalmente y golpeó al Pentágono a la altura de la planta. Lo que es más, se las arregló para hacer esto sin siquiera rizar el césped inmaculado del Pentágono. Y entonces, a pesar de su peso e inercia, el avión destruyó solamente una sección pequeña del primer anillo del edificio.



Lo que es más, estos mortales terroristas con habilidades de pilotos de carreras que sacrificaron sus vidas para chocar contra el Pentágono, lo hicieron de tal forma que sólo una pequeña sección que estaba en renovación fue dañada, y resulta que esa sección estaba siendo remodelada ¡Y muchas de las oficinas del sector estaban desocupadas! Lo que encuentro interesante es que el nuevo Comando Central de la Marina fue destruido.
Reportes tempranos de prensa señalaron que hubo 800 muertes en el Pentágono. Donald Rumsfeld, cuando se presentó al día siguiente, no corrigió este exagerado cálculo.

"Más de 800 personas habrían muerto el jueves cuando un avión comercial secuestrado chocó con el Pentágono, declararon fuentes oficiales. Los más de 20.000 civiles y militares que trabajan en el Pentágono se volcaron a los estacionamientos, guiados por luces de alarma blancas y rojas, y aullantes sirenas". -CNN (12/9/01)
BAJAS DEL PENTÁGONO TRAS EL ATAUQE TERRORISTA. "125 personas murieron en el Pentágono. * Otras 59 murieron a bordo del vuelo 77 de American Airlines. No contamos a los cinco terroristas. Aproximadamente 63 personas resultaron heridas en el ataque”. -DoD

La onda expansiva del choque se sintió a través de todo el edificio. 125 personas en el Pentágono perdieron la vida, a las que hay que sumar las 64 personas a bordo del Boeing que puede transportar a 269 pasajeros. En otras palabras, estaba casi vacío. Podría continuar pero hay muchos sitios de Internet que detallada y competentemente narran los acontecimientos de ese día, por no mencionar las docenas de sitios que sólo contribuyen a confundir aún más. En este momento, soy de la opinión de que el Boeing 757 definitivamente no golpeó al Pentágono, que el objeto que se estrelló en el Pentágono FUE diferente a los aviones de pasajeros comerciales que vimos claramente estrellarse en las torres gemelas.

Ahora movámonos a la pregunta de “Cómo lo hicieron”.

Una vez tuve una larga conversación con un individuo que estuvo en el conflicto del golfo Pérsico. Su trabajo era “programar” misiles, unos MUY inteligentes. Aún cuando era su trabajo, estaba completamente sorprendido de sus capacidades. Me dijo: “Pueden ser programados para ir por la calle, a nivel del suelo, doblar a la derecha o a la izquierda en una esquina y golpear al blanco designado, en el piso exacto ¡incluso en la ventana exacta que le programaste!”. Luego me dijo que estaba exagerando, pero no demasiado. Me lo describió de esa forma para enfatizar la capacidad de los modernos sistemas de guía.

Ahora, eso es asombroso.

Pero déjenme dejar esto perfectamente claro: No creo que un misil haya impactado al Pentágono.

El objetivo de mencionar a los misiles inteligentes que se usaron en la Guerra del Golfo es poner de relieve los sistemas guías. Nos hemos dado cuenta en los informes anteriores que las circunstancias que rodearon al ataque confundió a los testigos, ¡al nivel de decir que lo que chocó fue un helicóptero!

Pero hay tantos reportes sobre un avión que pienso debemos asumir que fue un avión, aún cuando ese avión podría haber “volado como un helicóptero”.

Una vez que me di cuenta de que la descripción de las maniobras de las bombas inteligentes calza perfectamente con lo que sucedió en el Pentágono, me hice la siguiente pregunta: ¿Ese sistema de guía podría ser utilizado en un avión? ¿Incluso en un jet comercial?

"El radar mostró que el vuelo 77 bajó haciendo una espiral, haciendo prácticamente un giro completo y dejándose caer los últimos 2133 metros en dos minutos y medio. La maniobra fue tan suave que queda claro que nadie luchaba por el control del avión. Y lo compleja de la maniobra sugiere que los secuestradores eran mejores pilotos de lo que muchos investigadores creían”.

De acuerdo a los reportes noticiosos, la forma en que el avión se estrelló contra el Pentágono es bastante parecida al “sistema de guía de misiles inteligentes”. Ahora, échele un vistazo al “Programa de Reemplazo Piloto Universal ” y fíjese todo lo que este práctico aparato puede hacer. Incluso muestra diagramas de maniobras del mismo tipo del que estamos hablando.  (Vaya y lea el documento técnico para asegurarse por sí mismo de que tal sistema estaba disponible, y que describe exactamente el comportamiento anómalo del 757).

Los primeros testimonios, antes de que la maquinaria de control mental tuviera tiempo de entrar en acción, señalan repetidamente que algo mucho más pequeño que un 757 fue visto golpeando al Pentágono.

Esto es confuso. ¿Puede ser que los testigos primarios sean más confiables que aquéllos que llegaron después, luego de haber visto el horroroso choque en contra de las torres gemelas una y otra vez por televisión, y tras escuchar repetidamente que un Boeing también había chocado con el Pentágono? Debemos considerar que también es posible que esa exposición repetida de los eventos del WTC por los medios de comunicación pudo crear ciertos mapas sinápticos que fueron transferidos a los hechos del Pentágono por simple sugestión. Uno de nuestros investigadores se dedicó a este problema y escribió:

Algunos testigos dijeron que vieron una avioneta, y otros como el Capitán de Ejército Lincoln Liebner, (quien probablemente tiene sus propios objetivos) dijeron que vieron un gran avión de pasajeros de American Airlines. Ahora bien, tal confusión en cualquier accidente es comprensible. Lo que es más, con una nave viajando a 740 kilómetros por hora, además de la conmoción, es difícil decir lo que realmente vieron.

Una de las cosas que no me hizo sentido fue que muchos de los informes reportan que el objeto golpeó la tierra, cuando sabemos por las fotos que no fue así. ¿Supuestamente algo tan grande como un 757 voló tan bajo como para golpear los postes de luz y no raspó el suelo? Algo está mal en ese cuadro.

Algunos incluso dicen que vieron gente en el avión, que vieron caras en las ventanas.

Las muchas descripciones existentes son confusas, confusas incluso al declararlo un jet comercial, y me llevan a pensar que lo que hayan visto con sus propios ojos, lo registraron como un avión de pasajeros de alguna clase.  Además, aun cuando la maquinaria propagandística nos dice que fue un avión grande, es obvio por los términos que usaron los testigos para describir el hecho (y por la evidencia en el sitio) que ese no fue el caso, aun cuando dé la “impresión” de que así fue. Lo que noté fue que aquéllos que NO VIERON al avión, tuvieron una impresión de lo más peculiar relacionada con el sonido.

"En ese momento escuché un ruido muy fuerte y rápido que sonaba como ”woooosh” que comenzó detrás mío y súbitamente se detuvo frente a mi, a la izquierda. En una fracción de segundo escuché el impacto y la explosión. Lo siguiente que vi fue la bola de fuego”.

"Yo estaba justo debajo del avión," dice Kirk Milburn, un supervisor de construcción de Atlantis Co., quien se encontraba en la salida “Cementerio Nacional Arlington” de la interestatal 395 cuando vio al avión dirigiéndose al Pentágono.

“Escuché un avión. Lo vi. Vi escombros volar”.

Aquí dice que vio al avión dirigirse al Pentágono. Y porque lo vio, también dijo “oí un avión. Lo vi. Vi escombros volar”.

Lo que dijo a continuación, sin embargo, no es consistente con un 757: “Supongo que iba golpeando los postes de luz”, señaló Milburn. “Sonaba como WHOOOSH whoosh, entonces hubo fuego y humo, y entonces escuché una segunda explosión”.

Noten que el testigo dijo: “supongo que iba golpeando los postes de luz”. Uno podría sospechar que no lo pudo ver si es que está suponiendo. Lo que es más interesante es lo siguiente: “Sonaba como WHOOOSH whoosh, entonces hubo fuego y humo, y entonces escuché una segunda explosión”.

Dos testigos describieron el sonido como un “¡whoosh!”. El segundo hombre dijo que era como “WHOOSH whoosh”, tal como lo dijo el otro hombre que no pudo ver al avión. Pero también nos dice que vio y escuchó al avión. Pero lo que describió definitivamente NO era un 757 volando sobre su cabeza.

Un 757, bajo NINGUNA circunstancia hace un sonido como “¡Whoosh!”. Y si el “Whoosh” hubiese sido hecho al golpear los postes de luz, es más que seguro que el ruido de los motores lo hubiese ahogado. Si un 757 pasa directamente por encima golpeando los postes de luz a 740 kilómetros por hora, ¡dudo que suene como un “woooosh”!

Si un 757 estaba lo suficientemente bajo como para golpear los postes de luz, debió volarle los tímpanos al testigo junto con todo lo demás que se encontrara en su camino.

Otro problema con esta parte de la historia es este comentario de un residente del área de DC:

Vivo en el area de DC, y las luces de la calle no son muy altas. De hecho DC es una ciudad bastante “boscosa”. Muchos de los árboles son más altos que los  postes de luz. (…) Si las alas de un 757 hubiesen golpeado los postes, los motores habrían caído a tierra, si es que el avión se encontraba en una posición derecha y nivelada.

Los gases de la combustión de estos tremendos motores  (que necesariamente habría hecho pedazos el suelo si es que hubiesen golpeado los postes de luz) son como un cañón supersónico. Su fuerza habría producido una experiencia indiscutiblemente impresionante y difícil de olvidar.

Quizás quiera echarle una mirada a los motores del avión… hay dos de ellos que cuelgan por debajo del avión. Mire acá para saber más sobre las especificaciones del motor jet, esquemas de la velocidad de escape de los gases de la combustión, y más.

Sin embargo la mayoría sólo puede decir que hubo un “woosh”. Otros testigos lo describen como un “silbido” que pasó volando como un misil.

"Algunos testigos oculares creen que el avión primero cayó en la tierra y luego se deslizó dentro del edificio. Los investigadores dicen que es una posibilidad, que en caso de ser cierta, podría haber salvado vidas”.

Ahora, aquí hay unas fotos tomadas dentro del Pentágono y de los trabajadores.

Las autoridades explicaron que el avión se pulverizó cuando impactó al edificio altamente reforzado. Luego se nos dijo que el avión se derritió (con la excepción de una luz de aterrizaje y las cajas negras… qué conveniente). En resumen, se nos ha dicho que 100 toneladas de metal se derritieron porque el fuego superó los 2.500º Celsius, prácticamente evaporando al avión. ¿Y aún así se supone que quedaron partes identificables de cuerpos por todos lados?
¿Y por qué alegan que gracias a que el avión cayó al suelo y se desaceleró, los daños al Pentágono fueron limitados, al tiempo que dicen que fue la fuerza del impacto la que vaporizó al avión? Simplemente no tiene sentido. [LAM]

Todo esto es interesante, solo contribuye a la confusión. No podemos hacer mucho con los testimonios. Pero miremos otro reporte:

Steve Patterson, de 43 años, dijo que estaba viendo por televisión los reportes de los choques en las torres gemelas cuando vio pasar un jet plateado por la ventana de su departamento en el piso 14 de la ciudad Pentágono. (…)

Dijo que el avión, que se aproximó al Pentágono bajo la copa de los árboles, parecía volar normalmente como si fuera a aterrizar, aunque iba demasiado rápido para estar a tan poca altura. Entonces, dijo, vio al Pentágono “envolver” al avión y brillantes llamas anaranjadas salieron del edificio. “Parecía un aterrizaje normal, como si supiera exactamente lo que hacía”, declaró Patterson, un artista gráfico que trabaja en su casa. “Pareció intencional”.

En el reporte anterior, no sólo tenemos a un testigo que dice que el avión parecía un “jet plateado”, sino que también dijo que el avión SONÓ como el “chillido agudo” de un caza.

Una serie de fotografías tomadas por fotógrafos federales oficiales en el lugar del choque muestran lo que parece ser una pieza fácilmente identificable como un ventilador de turbina de pequeño diámetro. Si el gobierno quiere probar que un Boeing 757-200 se estrelló en el Pentágono, ¿por qué nadie es capaz de identificar qué parte de qué motor es? Las fotografías muestran parte de un ventilador de turbina y fueron tomadas por Jocelyn Augustino, una fotógrafa de la Agencia Federal de Manejo de Emergencias (FEMA), en el lugar del Pentágono donde ocurrió el choque el 13 de septiembre de 2001. La pieza redonda parece tener menos de un metro de diámetro y está convenientemente apoyada sobre lo que parece ser parte de la caja del motor y delgadas piezas de material aislante.

Un Boeing 757 tiene dos grandes motores, que tienen casi 3 metros de diámetro y 3,5 metros de largo. Un motor Pratt & Whitney PW2043, usado en la mayoría de los 757, tiene un ventilador de un diámetro de casi 2 metros. Nada tan grande se ve en las fotos del FEMA. Las fotos son las 4414 y 4415 y pueden ser vistas en línea.

Para aquéllos que dicen que el ataque al Pentágono se realizó con un avión más pequeño o con un avión a control remoto, como el Global Hawk, identificar la pieza de la foto podría probar qué tipo de avión golpeó al edificio.

El Global Hawk es un robot con motor a combustión que usa un motor Rolls Royce Allison, construido a mano en Indianápolis, Indiana. El innombrado Global Hawk utiliza un sistema de guía por satélite, capaz de aterrizar en su destino programado con un margen de error de 30 centímetros.

Debido a que el Global Hawk es un avión a control remoto de vigilancia, su motor está contenido en una caja altamente aislada, para hacerlo extremadamente silencioso. Esto coincide con los reportes de los testigos oculares.  Prensa Libre de América le preguntó al testigo Steve Riskus, quien dijo que estaba a 30 metros del avión, qué oyó. El dijo que “no recordaba haber escuchado nada”. Si un 757 o un jet caza volara a máxima velocidad a 30 metros de un espectador, el ruido sería ensordecedor.

Lo importante es, si ha visto un 757, las palabras que usaría, aún si pasa a 740 kilómetros por hora, son ENORME, o INMENSO, o GIGANTE… palabras de ese tipo. También estaría, a pesar de la distancia, aplastado por el ruido de los motores jet. Pero una y otra vez, aun aquellos que más tarde NOMBRARON al objeto que impactó al Pentágono como un “avión de pasajeros comercial”, suelen utilizar términos descriptivos diferentes de aquéllos que hubieran sido ocupados si realmente un 757 hubiese sido el objeto que chocó. Esto podría ser fácilmente una consecuencia del proceso de “fabricación de recuerdos” que describí anteriormente. El hecho es que, excepto por unos cuantos funcionarios del gobierno, la mayor parte de los términos descriptivos de los testigos están más en concordancia con la descripción de algo distinto a un Boeing 757.

Muchos escucharon un jet. Otros escucharon un misil (todos los militares). Aquéllos que vieron al vuelo 77 acercarse desde el cementerio, lo vieron pasar silenciosamente (no escucharon el motor); mientras que aquéllos cercanos al jet asesino que vino por la autopista y que echaba abajo de los postes de luz oyeron su ruidoso grito al pasar sobre ellos, ajustando su velocidad para alcanzar la pared. Los testigos que vieron un solo avión caen en dos grupos distintos, cada uno viendo un avión diferente, distintos recorridos, a diferentes altitudes, con sonidos distintos y a diferentes velocidades. Un tercer grupo de testigos vio dos aviones aproximándose al Pentágono y uno de ellos giró y desapareció.

Con todo, tenemos la certeza de que fue un avión (tenía alas) el que derribó los postes en una trayectoria de entrada con maniobras “tipo misil inteligente”. Y sabemos que existe un “sistema de guía teledirigida” que tiene la capacidad de hacer exactamente lo que se ha descrito que hizo este objeto.

Sucedió que un corresponsal tuvo un encuentro interesante en un tren que tiene relación con la historia sobre el avión militar de transporte que tan "afortunadamente" detectó al "Boeing." En sus propias palabras:

Conocí a un caballero de ascendencia Jamaiquina que dijo ser un artista del comercio. Volvía a Washington. No tengo razones para dudar de la historia de este hombre pues se veía muy sincero y lo contó como “un hecho”.

Contó que cuando escuchó en la radio de su auto sobre los eventos del WTC, la tensión en la capital fue creciendo, y se puso a hablar con otra persona por teléfono celular mientras manejaba. Tenía el Pentágono a la vista en el momento del ataque y vio DOS aviones en el aire. Uno que parecía una pequeña avioneta tipo jet, pero no identificó al segundo avión. Dijo que fue este avión más pequeño el que chocó con el Pentágono, por lo que pudo haber sido cargado con explosivos y controlado remotamente por el otro avión (según recuerdo se reportó la presencia de un c-130 en el área)

La aseveración de que el vuelo 77 impactó al Pentágono es extremadamente sospechosa por otra razón: NO HAY PRUEBAS de que al desaparecer del radar sobre el sur de Ohio realmente “diera la vuelta” y se dirigiera a Washington. Vea el artículo del Washington Post que habla sobre los 30 minutos de completa invisibilidad al radar. El informe dice, en parte:

El avión, viajando desde el aeropuerto internacional de Dulles a Los Ángeles, fue secuestrado entre las 8:50 a.m., cuando los controladores aéreos hicieron su último contacto de rutina con el piloto, y las 8:56, cuando los secuestradores apagaron el radiofaro, el cual informa la identidad del avión, su altitud y velocidad a las pantallas de los controladores. El avión de pasajeros se estrelló en el Pentágono a las 9:41 a.m, cerca de 12 minutos después de que los controladores de Dulles dieron la alerta de que una nave no identificada se dirigía hacia Washington a alta velocidad. [...]

Sin señal de radar en sus pantallas, los controladores no se dieron cuenta que el vuelo 77 había cambiado su dirección.

A las 9:09 a.m., incapaces de contactar al avión por radio, el controlador de Indianápolis reportó un posible accidente.

La primera vez que alguien se dio cuenta de que el avión se estaba dirigiendo a gran velocidad hacia Washington fue cuando el avión secuestrado comenzó a descender y entró al espacio aéreo controlado por la instalación TRACON del aeropuerto internacional de Dulles, dijo una fuente de la aviación.

El primer controlador de Dulles se dio cuenta del avión que se movía muy rápido a las 9:25 a.m. Momentos después los controladores dieron la alerta de que aparentemente el avión se dirigía directamente a la Casa Blanca. Mas tarde giró e impactó al Pentágono.



El informe del Washington Post también contradice otros reportes que dicen que las radios transmitieron voces con acentos árabes haciendo sonidos amenazantes:

A diferencia de los otros dos aviones, cuyos pilotos aparentemente mantuvieron sus radios abiertas para que los controladores pudieran escuchar a los secuestradores, sólo había silencio en el vuelo 77.

Hay muchos problemas en el ataque al Pentágono que indican que no fue un Boeing 757 el que explotó dentro del edificio. Y esto nos lleva a las preguntas más interesantes.

Si no fue un Boeing 757, ¿por qué esta administración declara rabiosamente que lo fue? ¿Y por qué ataca a cualquiera que cuestione la historia difamándolo o acusándolo de “teórico de la conspiración”, en lugar de proveer la evidencia al público para que la examinen ellos mismo?
¿Por qué George Bush y su pandilla se han opuesto tanto a una investigación imparcial? (La investigación oficial no puede ser considerada imparcial.)

¿Por qué toda la evidencia de la escena del crimen fue destruida aún cuando el gobierno decía que “sus expertos” se estaban encargando de todo? ¿Por qué no podemos ver los numerosos videos del evento que ciertamente existen de las numerosas cámaras de seguridad en el área?
¿Por qué se niega al público el total acceso a la información sobre el crimen?

Después de todo, si el autor fuera identificado, no debería haber nada en la escena del crimen que debiera ser retenido para capturar al criminal ¿verdad? Y si hay tanta certeza sobre los autores, ¿por qué no dejar saber al público todos los detalles? Si fuera cierto, sólo podría ayudar al caso de la administración, ¿cierto? Entonces ¿por qué todo este obstruccionismo, todo el “tirar para atrás” y el secretismo? Si son tomadas acciones en buena voluntad con el honesto propósito de descubrir la verdad, no hay necesidad de guardar cuidadosamente el secreto. En tales circunstancias, sólo el culpable busca la oscuridad para esconder sus crímenes.

Toda la cuestión ha sido tan “administrada”, tan rápidamente “resuelta”, limpiada y llevada lejos, que apesta a un “trabajo de venta”.

¿Puede ser que se le ha vendido una “respuesta” al público?¿La respuesta que la administración de Bush quiere que creamos y se las ha arreglado para hacerlo en complicidad con los medios de comunicación?

Esta administración no parece tener ningún problema en creer que un fundamentalista loco secuestró cuatro aviones en la nación más poderosa de la Tierra, los voló por los alrededores por mucho tiempo, estrelló dos en las torres del WTC, aun cuando expertos en inteligencia claramente dijeran los días anteriores a los ataques que las pistas que llevaban a estas conclusiones eran estándares para Operaciones de Falsa Bandera.

Pero asumamos que eso pasó. Démosle a la administración el beneficio de la duda sobre su apuro en dar los nombres de los perpetradores y su pronta destrucción de las escenas del crimen. Asumamos que sus expertos se encargaron de todo en forma correcta y que sólo tienen una necesidad psicológica de mantener las cosas en secreto, o que hay una extremadamente buena razón para obstaculizar una investigación con todas las de la ley.

Seguimos enfrentados al hecho que más molesta: tomando en cuenta que alguien se tomó la molestia de conseguir un par de grandes aviones jet para chocarlos en el WTC, y que se nos han mostrado las imágenes de estos jets impactando los edificios una y otra vez, ¿Por qué el ataque al Pentágono fue tan “diferente” en tamaño y evidencia? ¿Sobre todo respecto a la repetición de los ataques por televisión?

¿Por qué no podemos ver los videos de vigilancia del jet de pasajeros chocando con el Pentágono?

Estamos atascados en un maravilloso acertijo. Si el 757 no golpeó al Pentágono ¿Por qué el gobierno dice que sí lo hizo?

Asumamos que FUE un tipo de avión distinto, o uno más pequeño. No importa quién estuvo tras estos hechos, si no usaron un 757 ¿Por qué? Si eran capaces de comandar un avión grande ¿por qué no usarlo en el Pentágono?

Ahora voy a ir en un par de direcciones especulativas, así que acompáñeme.

Hemos notado que hay una gran diferencia entre los ataques al WTC y el del Pentágono: la extensión de la destrucción.

Esto es como ES.

Entonces, hagamos la pregunta: ¿podría haber una razón para esto?

Lo primero que salta a la vista cuando comparamos los dos eventos es que las torres del WTC fueron totalmente destruidas y hubo una enorme pérdida de vidas, mientras que en el Pentágono sólo hubo un pequeño boquete, y luego el colapso de una sección que ni siquiera estaba totalmente ocupada porque aún estaba en construcción. O eso es lo que se nos ha dicho. Ya nos hemos dado cuenta de este fallo monumental de parte de los fundamentalistas islámicos suicidas, quienes pudieron planear una extraordinaria operación y aún así hicieron un daño limitado al Pentágono.

Entonces, debido al daño limitado, el Pentágono NO PUDO ser el objetivo de los terroristas fundamentalistas islámicos quienes estaban atacando al corazón del “Gran Satán” con quemante odio.

Qué tal si el daño limitado fuera una diferencia prevista con el muy público y bien publicitado ataque contra el WTC? ¿Destrucción total opuesta a mínima destrucción y daños? O destrucción planeada.

Esto nos lleva a por qué un tipo de avión distinto podría haber sido usado: la única respuesta obvia es que era necesario para infligir una cantidad exacta de daño, ni más ni menos.
Entonces teoricemos que la precisión era la mayor preocupación, y es por ello que el aparato usado en el ataque fue diferente.

Lo que nos lleva de vuelta a la idea de un avión equipado con un sistema de guía de misiles inteligentes, un sistema que puede guiar a su portador para, literalmente, dar vuelta a la esquina y darle al blanco con una precisión “asombrosa”.

Si la precisión fue la mayor preocupación (precisión del tipo de darle a la ventana exacta del piso designado y capaz de hacer exactamente el daño designado), llegamos a la idea de que tal precisión y limitación era esencial por algún motivo.

¿Y cuál podría ser esa razón?

¿Por qué los conspiradores querrían destruir totalmente un blanco, donde los civiles fueron las víctimas principales, y sólo destruir parcialmente a otro?

Lo que inmediatamente salta a mi mente es uno de los trucos más viejos del libro criminal: heridas autoinducidas como coartada.

Pero también hay una posible segunda razón. Los lectores quizás recuerden los asesinatos de Tylenol donde se puso cianuro en botellas al azar, y las devolvió a los estantes y tiendas, cosa que murieran personas al azar, para encubrir el hecho de que un asesinato específico era el objetivo de este acto de terror aparentemente “aleatorio”. Entonces, ¿que tal si había alguien o algo en el Pentágono que alguien quería salvar O destruir?

La Marina perdió su nuevo centro de comando.

Nos preguntamos, por supuesto, si la ONI (Oficina de Inteligencia Naval) de la Marina era una agencia que aún no había sido infiltrada por la invasión neocon de Washington. ¿Podría ser la razón del por qué el comando central naval fuera destruido? Considere lo siguiente:

El libro de Martin "Los Conspiradores" es una historia secreta de finales del siglo 20 y una versión sin censuras de lo que sucede tras los bastidores de los operadores políticos. En su libro escribe que contrariamente a la creencia popular, la ONI es la más poderosa de las agencias de inteligencia de Estados Unidos. “LA ONI ya posee una estructura ilegal encubierta. Ya tenían un mecanismo antes de que existiera la CIA. Tenían contactos con servicios de inteligencia extranjeros y gobiernos que la CIA nunca podría soñar obtener”.

“La única gente sobre la cual la CIA no pasaría por encima para conseguir sus objetivos, era la ONI. Fácilmente podría arruinar una investigación del FBI o de la DEA, pero nunca de la ONI, porque les tenían terror”. “La ONI es donde el verdadero y profundo control está. Es donde se guardan los verdaderos secretos. Es lo que la ONI siempre supo hacer mejor. Guardar secretos. Acumular secretos. Almacenar secretos con el propósito de ganar control”.

“Cuando le pregunté ‘¿qué secretos?’ me respondió: “una cosa que te puedo contar es que la ONI fue decisiva para derribar al ex presidente mexicano López Portillo. Portillo se puso muy amistoso con George Bush y la CIA, y la ONI nunca se ha alineado con la facción de Bush. De lo que puedo decir, nunca ha estado alineada, pero siempre ha sido hostil al Club de Campo Conspirativo del Este y sus amigos en la CIA. La facción Hill Casey es la facción George Bush-Allen Dulles”.

No es una idea muy agradable ¿eh? Que un golpe de estado se ha apoderado de EEUU, que los secretos de modos y medios (comité de recursos humanos) para mantener las "libertades norteamericanas" pueden haberse destruido en el WTC, y en unos pocos cuartos seleccionados del Pentágono. Entonces, esta hipótesis en realidad se ha dividido en dos direcciones: coartada u homicidio intencional.

Si consideramos la teoría de la coartada, incluimos la idea de que la precisión era necesaria para asegurar que CIERTOS ocupantes del edificio no fueran dañados. Si te inflinges una herida para alejar las sospechas, ¡no querrías cometer un error y volarte la cabeza!

Así, considerando las preguntas anteriores, es posible que unos cuantos conspiradores se encontraran EN EL PENTÁGONO EN EL MOMENTO DEL GOLPE, o que ciertos BLANCOS estaban en el edificio, y esta fue la razón para un “tipo distinto de ataque”: un golpe de precisión. Y es posible que ambos objetivos pudieran ser alcanzados con un ataque preciso.
Newsweek tímidamente meciona que "el 10 de septiembre, NEWSWEEK supo que un grupo de altos funcionarios del Pentágono repentinamente cancelaron sus planes de viaje del día siguiente, aparentemente por motivos de seguridad".

Si lo que hemos teorizado es verdad, no parece ser que cancelaran sus viajes porque podrían haber tomado el jet equivocado - después de todo, según ellos, no sabían de la posibilidad de un ataque terrorista -, sino para asegurarse que estarían en el lugar para su coartada... o destrucción. Estaría bastante interesada en saber quiénes fueron estas personas.

Sin datos no podemos responder estas preguntas aparte de estas líneas de conjeturas, realmente no podemos ir más allá.

El hecho fue que el edificio que representa no sólo nuestro estatus en el mundo, sino nuestra habilidad para mantenerlo (nuestra fuerza militar) fue golpeado por presuntos terroristas. La reacción emocional de las masas de ciudadanos fue no sólo que Estados Unidos tenía el derecho de responder de vuelta con todo su poder, sino que DEBÍA hacerlo. Esto también es un “lo que ES”. Las masas de civiles no contemplan la posibilidad de que la herida autoinflingida sea una coartada.

Los criminales han colocado esta manta frente a los ojos del jurado por mucho tiempo. Existe otro problema en el hecho de que el gobierno no libera los videos de seguridad que obviamente muestran QUÉ GOLPEÓ al Pentágono.

Ya que no hay razones para que los conspiradores NO hagan públicos estos videos , AUN CUANDO OTRA NAVE FUERA USADA EN EL GOLPE AL PENTÁGONO porque, después de todo, un ataque terrorista es un ataque terrorista, no importa que tipo de avión se use ¿cierto?
Si, de acuerdo a la historia de encubrimiento de esta administración, Osama Bin Laden tuvo los recursos para llevar acabo el secuestro de jets comerciales para chocarlos en el WTC, no hay razón para que no haya podido conseguir un avión vigía a control remoto, o incluso un jet más pequeño, o cualquier cosa similar. Y habría sido muy fácil cargarle el muerto a Osama. Es decir, si Osama puede ser culpado por los atentados a las torres gemelas con un par de jets comerciales, no hay razón para que no pueda ser culpado de atentar contra el Pentágono con alguna otra cosa.

En otras palabras, no importa lo que haya sido – un Boeing 757, o una cometa con una bomba nuclear amarrada en la cola – no existe ninguna razón que “El poder que es” no pudieran dar vuelta a su favor.

Entonces ¿por qué no quieren liberar las cintas de las cámaras de seguridad?

Si fue el vuelo 77 ¿Por qué no podemos VERLO?

Si fue algo más ¿Por qué no podemos VERLO?

Diablos, los estadounidenses son muy buenos aceptando explicaciones. No hay razones para que no acepten que Osama y su pandilla pudiera apoderarse de otra cosa y volarla hacia el Pentágono. Después de todo, se dijo que Osama tenía una guarida subterránea gigantesca con misiles y un pequeño ejército. ¡No hay razón para que no fuera acusado de ponerle las manos a un Global Hawk!

Entonces, otra vez, y otra vez, y otra vez: ¿Por qué los estadounidenses NO PUEDEN VER QUÉ CHOCÓ CON EL Pentágono?

Es claro que no es debido a consideraciones hacia la pena de las familias de las víctimas. Después de todo, los videos de los aviones incrustándose en las torres fueron mostrados una y otra, y otra, y otra, y otra vez hasta que el mundo entero entró a un frenesí de rabia y pena.
Por cierto, asumiendo que nuestra teoría de la complicidad directa de Bush y compañía es correcta, si los conspiradores arreglaron el asunto de la manera en que creemos que lo hicieron, hubieran preparado la nave que impactó al Pentágono muy cuidadosamente, y no habría nada acerca de eso que pudiera levantar sospechas o revelar su identidad, ¿verdad? Entonces solo les quedaría sacar los videos, mostrarlos a todo el mundo y culpar a Osama, ¿Cierto?

De hecho, este pequeño tema es un problema. Sugiere que si los videos de vigilancia fueran mostrados, revelarían toda la verdad. Y cualquiera que esta sea, quienes están en el poder lucharán hasta su último aliento para ocultarla.

La única respuesta que tiene sentido es que el Pentágono fue impactado por una nave que un experto podría identificar fácilmente como algo inaccesible para cualquiera, excepto el personal militar de un estado muy poderoso: los Estados Unidos, o quizás, incluso Israel.

¿Recuerda lo que escribí al principio, de que recibimos información de que EXISTEN fotos satelitales de lo que sucedió y que están en manos de otros gobiernos?

Bueno, la historia es que lo que haya sido lo que le pegó al Pentágono fue lanzado desde un barco mar adentro, y que no fue un misil. Vaya otra vez y mire las bonitas imágenes del “Programa de Reemplazo Piloto Universal” para ver las ingeniosas rampas de lanzamiento para estos prácticos aviones. Eche un buen vistazo a la demostrada maniobrabilidad y compárelo con la descripciones del patrón de vuelo del sorprendente y mítico vuelo 77.

De hecho es completamente factible que el Programa de Reemplazo Piloto Universal (UPR) haya sido usado en todos los aviones secuestrados. Después de todo, fue manufacturado por Boeing, uno de los más grandes del Complejo Industrial Militar, y pudo ser fácilmente instalado durante “manutenciones de rutina”. También habría sido bastante fácil de instalar algún gas venenoso para que fuera liberado a través del sistema interno de ventilación, cosa de matar a todos en el avión y permitir que el UPR tomara el control. El tema de por qué el vuelo 93 tuvo que ser derribado es fácilmente explicable por una posible falla en la liberación del gas. Si no funcionó como debía, o si alguien se las arregló para conseguir una máscara de oxígeno a tiempo, ciertamente explicaría la necesidad de derribarlo.

Ahora llegamos al tema final: ¿Qué le pasó al VERDADERO vuelo 77? ¿Qué le pasó a los pasajeros? Para aproximarnos a este problema con la suficiente calma, el lector quizás quiera echar una mirada al ¿Qué fue lo que realmente le pasó al vuelo 93?

Las conclusiones de este interesante análisis son espantosas, pero completamente lógicas:

Entonces es calro que el avión fue derribado (por un jet militar de EE.UU.), pero sin embargo esta teoría también deja algunas evidencias sin explicar, incluyendo las llamadas telefónicas de los que se transformarían en contra-secuestradores.

También está la cuestión de por qué este vuelo en particular habría sido el blanco, en lugar de los otros tres vuelos secuestrados. Después de todo, no estaba cerca de ningún blanco potencial y tampoco representaba ninguna amenaza inmediata para nadie, excepto para sus pasajeros. Ya que la amenaza no fue aliviada al desparramar pedazos de los cuerpos de los pasajeros en un campo de Pennsylvania, tiene poco sentido que el vuelo 93 haya sido derribado mientras se permitía que los otros volaran sin impedimentos contra los símbolos del poder militar y económico de Estados Unidos.

Algunos han argumentado que el gobierno de Estados Unidos rápidamente se habría atribuido el mérito si hubiese dado la orden de derribar al vuelo 93.
Llevarse el crédito de destruir lo que esencialmente era un misil guiado, aunque uno tripulado, le habría dado a las autoridades en Washington una oportunidad de redimirse, al menos parcialmente, por fallar en responder a los otros tres vuelos secuestrados.

Al parecer hay argumentos en contra para ambas teorías.

Pero ¿y si las dos teorías no son excluyentes? ¿Qué tal si miramos lo que sucedió con el vuelo 93 desde una perspectiva ligeramente disitinta? ¿Qué tal si tomamos el punto de vista de que los eventos del 11 de septiembre fueron, esencialmente, un trabajo interno? ¿Con los militares  y los servicios de inteligencia en directa complicidad, o al menos haciéndose los desentendidos?

Entonces la destrucción del vuelo 93 surge otra pregunta obvia: ¿Por qué el aparato norteamericano de seguridad nacional derribaría cualquiera de los cuatro vuelos? Asumiendo que algún General en alguna parte no tuvo la noción de que su deber era defender al país de estos ataques, ¿por qué derribarían a un avión que era parte de una misión encubierta en beneficio de la misma gente que ordenó dispararle?

Si este fuera el caso, sólo habría una razón: destruir cualquier evidencia en el evento de que la misión se viera comprometida por cualquier motivo.

¿Y cómo, se preguntará, podría la misión ser comprometida? Un posible escenario podría ser si, digamos, los pasajeros hubiesen podido desarmar a los secuestradores y tomar control del avión? Eso dejaría docenas de testigos de lo que realmente sucedió ese día aciago. El contenido de las “cajas negras” puede ser suprimido fácilmente; un montón  de testigos, especialmente unos testigos elevados a la categoría de héroes norteamericanos, es otra cosa.

Por muy perturbador que sea, la respuesta a la pregunta de qué fue lo que realmente sucedió con el vuelo 93 podría ser que fue derribado precisamente porque los pasajeros pudieron someter a los secuestradores, o al menos hicieron el intento. Podría ser que el mismo heroísmo que cínicamente ha resaltado el régimen de Bush, pudo ganarles una ejecución sumaria.

Una “ejecución sumaria”.


El problema con el texto anterior es que hubo un reporte noticioso que dijo que el vuelo 93 aterrizó en Cleveland y fue evacuado:

Reporteado por el equipo de 9News
Producción Web por:Liz Foreman
11/9/01 11:43:57 AM
Un Boeing 767 hizo un aterrizaje de emergencia el jueves en el aeropuerto internacional Cleveland Hopkins debido a que podría llevar una bomba a bordo, dijo el mayor Michael R. White.

White dijo que el avión ha sido trasladado a un área segura del aeropuerto y que ha sido evacuado. United identificó al avión como el vuelo 93. La línea aérea no dijo cuántas personas habían en el vuelo. United declaró que estaba “profundamente preocupada” por otro vuelo, el 175, un Boeing 767 que viajaba desde Boston con destino a Los Ángeles.

Por parte de la aerolínea, el CEO James Goodwin declaró: "Los pensamientos de todos en United están con los pasajeros y la tripulación de esos vuelos. Nuestras plegarias también están con todos aquellos en tierra que pueden estar involucrados. United está trabajando con las autoridades pertinentes, incluyendo el FBI, para obtener más información sobre los vuelos”.

Cuando vaya al enlace donde la historia fue archivada, encontrará esto:

Avión aterriza en Cleveland; se teme bomba a bordo
Reporteado por : equipo 9News
Producción Web por: Liz Foreman 11/9/01 11:43:57 AM
Esta noticia ha sido removida de WCPO.com. Era una noticia preliminar, y contenía hechos incorrectos.

Ahora, sólo supongamos que no fue el vuelo 93 el que aterrizó en Cleveland sino que fue el vuelo 77. Quizás no es una solución tan descabellada, dado que reportes sin verificar indican que

...hay algo raro con los números seriales de los vuelos 93 y 175. Los números de serie de los aviones ORIGINALES son los MISMOS número de serie de aviones que AÚN ESTÁN VOLANDO. 591UA 612UA.

Aunque N números pueden ser transferidos, el número de serie original del fabricante NO PUEDE ser cambiado. De acuerdo a algunos testigos, el Boeing 757-222 con NÚMERO DE SERIE 28142 está volando sobre Chicago bajo el alias 594UA. De acuerdo a la FAA, el Boeing 757-222 N594UA  ahora vuela con un número de serie DISTINTO, el 28145.

Si pueden cambiar números sin problemas, no hay razón para pensar  que el vuelo 77 no podría haber sido blanco de una maniobra similar. El hecho es que todos los aeropuertos “9-11” eran servidos por una compañía de propiedad israelí: ICTS. ICTS vende servicios a todos los aeropuertos desde los cuales operaban los aviones secuestrados, incluyendo la seguridad, algunas veces a través de una subsidiara como Huntleigh USA Corporation.

Se ha sugerido que la increíble hazaña de secuestrar cuatro aviones sin un solo arresto en la sala de embarques debió requerir los recursos de una nación-estado. (...) Una compañía tuvo acceso automático a todos los aeropuertos desde donde despegaron los aviones secuestrados... una compañía israelí. Una en la que fácilmente los agentes del Mossad podrían encontrar trabajo, sin que la administración supiera quiénes eran o cuáles eran sus verdaderos propósitos.

Pero una cosa es clara. Gracias a la alerta Odigo, alguien supo lo suficiente de los planes para advertir a Odigo antes de que los aviones se separaran de las puertas de embarque, y sin embargo no llamaron a la compañía de seguridad israelí en los aeropuertos, lo que podría haber detenido a estos vuelos. Piense en ello por un momento.

Entonces ¿qué sucedió con los pasajeros del vuelo 77? Cuando desapareció del radar ¿un avión a control remoto apareció repentinamente en el radar apuntando al Pentágono y realizando un ataque de precisión? ¿Es esa la razón para todas las extrañas anomalías del patrón de vuelo del vuelo 77 y las extrañas historias sobre el vuelo 93? ¿De dónde vinieron las partes de cuerpos que fueron tan rápidamente identificados como pertenecientes a los pasajeros del Vuelo 77 que según se afirma golpeó al Pentágono? ¿Trozos de cuerpos que sobrevivieron a un accidente que vaporizó al avión casi instantáneamente?

De una extraña manera, la pregunta sobre qué sucedió con los pasajeros del vuelo 77 nos lleva al corazón del misterio. Si el vuelo 77 no está en los videos de vigilancia, ¿por qué “El poder que es” INSISTE en que sí lo está, aún cuando sería tan fácil colgarle un nuevo robo a Osama, diciendo que se apoderó de un avión a control remoto, o cualquier otra cosa? Podría incluso explicar que un avión militar norteamericano volara dentro del Pentágono, diciendo que Osama poseía uno y que lo pintó para que pareciera una nave de EE.UU.

La “prueba” de que fue el vuelo 77 el que se estrelló en el Pentágono descansa enteramente en los testimonios de autoridades de gobierno, las cuales seguramente tienen una agenda, incluso si sólo es para mantener sus trabajos, al revés del masivo número de individuos que han visto destruidas sus vidas y carreras por hablar en contra de la administración de Bush. De hecho, la principal prueba de que el vuelo 77 chocó en el Pentágono fue la famosa “llamada telefónica” de Bárbara Olson a su marido ¡que NO pudo haber sucedido!

La versión oficial de los eventos incluye numerosos reportes de llamadas de teléfonos celulares hechas desde los aviones secuestrados el 11/9. Estos reportes dan credibilidad a la historia oficial de los “secuestradores árabes” a las pocas horas de los ataques, de la forma más dramática. Aún así, las llamadas con teléfonos celulares desde naves que se mueven rápidamente no son comunes. La frecuencia y duración de las llamadas supuestamente hechas el 11/9 exageran la credulidad. ¿Es éste el  talón de Aquiles del relato de Bush / CNN sobre el 11 de septiembre? [Physics 9-11 org]

Tenga en mente que Bárbara Olson estaba casada con el Fiscal general de EE.UU., Theodore Olson, un ayudante cercano y amigo del presidente George W. Bush, era una prominente miembro de la élite conservadora de Washington. Este grupo, que también incluye al juez de la Corte Suprema Clarence Thomas y al consejero independiente Kenneth Starr, provocó que Hillary Clinton se quejase "de una conspiración derechista enorme”. Revise el Centro para la investigación cooperativa para una cronología detallada, incluyendo los reportes contradictorios de Ted Olson sobre la supuesta llamada de su esposa.

Entonces ¿Dónde están Barbarita y el vuelo 77?

Hasta donde sabemos Barbarita estaba en el complot desde el principio e incluso fue preparada con una conveniente máscara antigas para protegerla del veneno que mató a todos los demás abordo. Si fue así, no sería raro que esté “preparando el bunker” para cuando Bush y compañía lleguen para sobrellevar el Apocalipsis que iniciaron. O pudo tener una pequeña cirugía plástica y está esperando a Ted (quien recientemente renunció a su trabajo) en aquella bonita isla caribeña a la que siempre quisieron retirarse. Se “conocerán y casarán” y todos estarán felices de ver que Ted encontró el amor otra vez.

En cuanto a los pedazos de cuerpos identificados a través del análisis del ADN, no nos engañemos. Cualquier grupo con la voluntad y poder para cometer la destrucción que ocurrió el 11 de septiembre no tendría problemas en plantar algunas muestras verdaderas de los cuerpos gaseados a bordo del vuelo 77, luego de que aterrizara en el aeropuerto Wright Patterson, en el sur de Ohio.

AGREGADO:

En los dos años y medio que han pasado desde que comenzamos esta serie de comentarios, el movimiento de la gente que duda de la historia oficial del 11/9 ha crecido. Ahora hay muchos sitios en la red dedicados a la cuestión. Pero ¿cuántos estadounidenses están dispuestos a mirar los hechos de frente y confrontar la verdad?: que el “ataque” del 11/9 fue un trabajo interno. El lector quizás desee mirar los artículos: El mossad y las empresas de mudanza: ¿maestros del terrorismo global?, como también la quinta columna y Mahmoud Ahmad y el culto secreto.

Como Mike Ruppert bosqueja en su libro “Crossing the Rubicon” hubo por lo menos cinco “ejercicios de entrenamiento” en progreso la mañana del 11 de septiembre de 2001. Cada uno de ellos, incluyendo los que aún no conocemos, estaban bajo el control del vicepresidente Dick Cheney.

1 ) EJERCICIO MILITAR VIGILANCIA DEL NORTE: Se transfirió la mayor parte de los interceptores de combate y posiblemente muchos AWACS del noreste hacia el norte de Canadá y Alaska. Este explica, en parte, por qué había sólo ocho (8) interceptores de combate en el NE el 11 de septiembre.
2 ) EJERCICIO de GUERRA BIOLÓGICA no militar TRIPOD II: el FEMA llegó a la ciudad de Nueva York el 10 de septiembre de 2001 para establecer el puesto de mando para FEMA, la CIUDAD DE NUEVA YORK Y el MINISTERIO DE JUSTICIA en el EMBARCADERO 29 de Manhattan. Esto muestra que nuestros amos son querendones. Hicieron un esfuerzo tremendo para minimizar las muertes requeridas. Esto probablemente fue forzado en ellos por el CFR, tipos agradables que de vez en cuando deben matar a gente inocente.
3 ) EJERCICIO de JUEGOS DE GUERRA, GUARDIA VIGILANTE: Este ejercicio simuló aviones secuestrados en el sector de noreste. La comisión de 11/9 sólo hace mención de este ejercicio y mintió sobre su objetivo. La comisión dijo que su objetivo era interceptar bombarderos rusos.
4 ) EJERCICIO de JUEGOS DE GUERRA, GUERRERO VIGILANTE: Este ejercicio simulaba aviones secuestrados en el sector noreste.
5 ) EJERCICIO de JUEGOS DE GUERRA, GUARDIA DEL NORTE: Este ejercicio simulaba aviones secuestrados en el sector noreste.
Al momento de los secuestros reales, había alrededor de 22 naves secuestradas en el radar del NORAD- Algunos de estos simulacros eran ejercicios de “Vuelo vivos”, y eran aviones al parecer controlados por control remoto que simulaban ser aviones secuestrados. Uno de los simuladores agregó electrónicamente los aviones secuestrados al sistema. Todo esto en el momento en que los secuestros verdaderos comenzaron. NORAD no pudo diferenciar entre los diecisiete falsos, y los cinco verdaderos.
Cheney pudo. Esta claro que sabemos muy poco de cómo se ejecutó el 11/9. Deberíamos saber que fue una operación de alta tecnología que envolvió a docenas de proyectos mayores, cada uno empleando gran cantidad de recursos.

Medio millón de personas marcharon en New York en contra de George Bush. Están enojados de que haya provocado la guerra, el déficit, reducciones de impuestos para los ricos, y la pérdida de derechos más asombrosa alguna vez vista en los EE.UU. ¿Pero cuánta cobertura obtuvo esta marcha en los medios? ¿Cuántas de aquellas 500,000 personas saben cuán mal realmente está la situación? ¿Cuántos están dispuestos a considerar que la Inteligencia israelí con la ayuda de un grupo de la gente en el gobierno de Bush, pudo muy bien haber organizado los ataques contra el Centro Mundial del Comercio y el Pentágono a fin de justificar "una guerra contra el terror", es decir, contra los árabes? Esta guerra comenzó en Afganistán y ha continuado en Irak. Al parecer, mientras la administración se prepara para tomar Irán y finalmente Siria, los países nombrados en un informe de 1996 preparado para el primer ministro israelí Netanhayu por miembros de la conspiración de neoconservadores. Eretz Israel, es el nombre de la tierra que Dios dio a los judíos. Y ellos lo quieren todo.